Gerardo
Raynaud
Esta fotografía donde aparece
nuestra representante Trini Ramírez Porras con algunas de las candidatas que
por otros departamentos concursaron en 1951 en Cartagena, muestran aspectos de
los trajes y modas que por ese entonces se usaban en nuestro país. Ese año la
Señorita Valle, Leonor Navia Orejuela fue elegida Miss Colombia; virreina fue
María Elvira Cotes Blanco, representante del Magdalena; como princesas Martha
Elena Duque Giraldo de Antioquia y Elsie Teresita Zubiría Merlano de Bolívar.
Además de nuestra representante en ese año y las mencionadas anteriormente,
otras 5 representantes de varios departamentos completaron las diez
concursantes de ese año.
Desde mediados del siglo pasado ha sido tradicional
que las distintas regiones del país seleccionen sus candidatas al concurso de
belleza que escoge la mujer más bella de la nación. Nuestro departamento
siempre se ha preocupado por mantener
esta costumbre, tanto es así que desde las primeras versiones, Norte de
Santander ha presentado sus candidatas, tal vez desde 1948 cuando nos
representó la hermosa Carmencita Meoz, posiblemente nuestra primera candidata.
Las referencias me indican que el concurso nacional se inició en 1934 y luego
tuvo un receso hasta después de la segunda guerra mundial, para reiniciar en
1947, situación que podría originar un Guinnes del reinado de belleza más
largo, 13 años!
Pues bien, en el año 51 del siglo 20, posiblemente se
estaba pensando en la opción de nuestra segunda o tercera postulante y como
siempre sucedía en esos casos por esa época, las convocatorias eran bastante
cerradas, tal vez debido a las limitaciones de información siempre se
presentaban debates y una que otra discrepancia que afortunadamente se limaban
sin mayores dificultades.
En esta ocasión, se llamó Torneo de Belleza al evento
para elegir la representante regional y se designó al Comité Departamental
Pro-Belleza en Cúcuta, así como se hizo lo correspondiente en Ocaña y Pamplona.
El gobernador Luis Enrique Moncada nombró un Comité de
lujo, con las personalidades del momento, entre los que estaban Guillermo
Eliseo Suárez, Rafael Canal, Ernesto Vargas Lara, Oscar A. Osorio director del
periódico Hoy, el de mayor circulación de entonces y periodistas como Montegranario
Sánchez entre otros, lo cual originó cierto descontento entre los demás
informadores, quienes se consideraron discriminados y así lo manifestaron a
través de sus medios editoriales.
La primera cita se programó para el 12 de octubre,
fecha en la cual se realizaría la primera eliminatoria. Estos ‘torneos’ no eran
como lo son hoy en día. No existía una organización permanente y había que
conseguir los recursos mediante ayudas tanto privadas como oficiales, por esa
razón, las participantes era, por lo general, niñas de familias pudientes, que
tuvieran la posibilidad de brindarles el apoyo económico pero además de logran
recaudar lo suficiente con los demás sectores para ofrecer una participación de
altura.
En la primera fase de este torneo, los medios de
comunicación realizaron ‘encuestas’ para encontrar las candidatas más
‘apropiadas’ y para ello se organizaron de una manera bastante peculiar; se
establecieron tres grupos del género masculino que propusieran sus candidatas,
los solteros, los casados y los viudos. Cada grupo escogió su portavoz y el
resultado fue el siguiente: Los solteros, en cabeza del médico Humberto Pineda
Ropero propuso a Elvira Pérez, Teresa García Durán y Ana Luisa Colmenares.
Otros solteros quienes no se dejaron opacar por su vocero, como Jorge Soto
Olarte y el comerciante Hernán Botero de la Calle, se inclinaron por Elvira
Pérez, Graciela Ramírez Maldonado y Gladys Ramírez Lares. Por el lado de los
casados, se manifestaron los doctores Roberto Ardila Ordoñez, Guillermo Eliseo
Suárez y Rafael Canal Sorzano quienes coincidieron con los solteros en el
nombre de las candidatas; finalmente, el representante de los viudos, el
exembajador de Colombia en Caracas, el apreciado caballero don Manuel Guillermo
Cabrera, mostrando sus dotes de diplomacia, adquiridos con los años y con su
experiencia en los cargos de representación, se excusó de dar su opinión, pues
manifestó que consideraba ‘indebido intervenir en debate tan azaroso’.
Llegado el día de la primera eliminatoria, las
candidatas fueron: Elvira Pérez Escalante, Cecilia Gil Ceballos, Elvira
Escalante y Gladys Ramírez Lares. Casi de inmediato se produce el primer
descontento y esta vez corre por cuenta de don Antonio Abrajim quien era el
Presidente del Automóvil Club seccional, manifiesta que le falta organización
al debate sobre las aspirantes y lanza la candidatura de Trina Ramírez Porras,
quien será respaldada por los integrantes del Club. Parece que el Comité
Pro-Belleza no logró zanjar las diferencias que se presentaron en el transcurso
de la selección de la candidata por la ciudad, pues finalmente no hubo una
candidata que representara la ciudad, sino que las aspirantes fueron acogidas
por distintas instituciones privadas. Igual sucedió con la candidata de
Pamplona, de manera que la contienda terminó presentando siete candidatas y
solamente dos por los pueblos de Ocaña y Durania.
En resumen, las postulantes fueron: Trina Ramírez
Porras en representación del Automóvil Club, Cecilia Gómez Maichel por Ocaña,
Cecilia Gil Ceballos candidata del Club de Cazadores, Luz Marina Gáfaro,
representando a Durania, Gladys Ramírez Lares por los Clubes del Comercio y
Tennis de la ciudad de Cúcuta, Mercedes García Herreros por los empleados
bancarios y Anita Cuberos Niño quien representaba la Colombian Petroleum
Company.
El jurado estaba integrado por el Gobernador Moncada y
el alcalde Jordán Pabón, además de don Caetano Severini, los profesionales
Efraín Vásquez y Rafael Jaramillo, así como el Cónsul de Venezuela y el
comandante de la brigada del Ejército Nacional y los señores Ernesto Tono y
H.V. Hijar, ciudadano extranjero.
El evento se desarrolló el martes 23 de octubre, en el
Teatro Municipal y la velada fue amenizada, a partir de las nueve de la noche,
por el trio Los Bucaneros, una versión criolla de Los Panchos. Se presentó una
obra de teatro protagonizada por la compañía de Ernesto Albán. Cabe anotar que
el jurado ya había evaluado a las candidatas el día anterior, en una sesión
privada que se realizó en el Club Tennis, por lo tanto, esa noche sería la
proclamación y coronación de la reina que representaría el departamento en el
reinado del once de noviembre. Poco antes de la medianoche, cuando los ánimos y
las expectativas estaban en su punto culminante, el vocero del jurado, el
gobernador Luis Enrique Moncada, leyó el bando mediante el cual se coronaba a
la bella Trinita Ramírez Porras soberana de la belleza norte santandereana y a
partir de ese momento, el jolgorio y la rumba corrió por cuenta de la orquesta
Santander dirigida por el Maestro Monroy.
Posteriormente, nuestra linda representante expidió
los decretos reales nombrando sus ministros y miembros de su comitiva quienes
la acompañarán al reinado nacional y recibiendo las felicitaciones de sus
competidoras así como la de la reina nacional de la belleza Myriam Sojo, quien
le augura éxitos en el concurso y que espera poder hacerle entrega a ella del
cetro y la corona, el próximo once de noviembre.
Recopilado por: Gastón Bermúdez V.
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