miércoles, 3 de abril de 2024

2406.- PRIMER NACIONAL JUVENIL DE BASQUETBOL, 1954

Gerardo Raynaud (La Opinión)

Selección Norte. De pie de izquierda a derecha: Raymond Kan, Juan Vargas, Juan de Dios Joves, Martha Canal, Hernán Gómez, César Vargas, Carlos Castillo. Agachados: Alfonso Rodríguez, Gustavo Martínez, Luís Francisco Colmenares, Ciro Medina y Roque Peñaloza.

El apelativo de ciudad basquetera de Colombia que se le ha dado tradicionalmente a Cúcuta, no fue fruto del azar ni de que fuera en esta ciudad donde se masificó este deporte en el decenio de los cincuenta, gracias a la dedicación de los Hermanos de la Escuelas Cristianas, más conocidos como Lasallistas y en especial a la perseverancia del hermano Arturo Monier, quien años atrás había impulsado este deporte en el Instituto La Salle de la capital de la república y posteriormente en Pamplona, cuando fue trasladado allí hasta que finalmente aterrizó en Cúcuta, desde donde emprendió su verdadera cruzada para que este deporte fuera la indiscutible vocación de los jóvenes cucuteños.

Ahora bien, como la memoria es corta, especialmente en los países del trópico, el común de la gente asocia el real inicio de la fiebre de este deporte en la región, con la realización del XVI Campeonato Suramericano de mayores y I juvenil masculino de básquetbol que se desarrolló en la ciudad en 1955.

Pero nada más errado. El auge de este deporte comenzó el año anterior, en 1954 cuando se escenificó en la ciudad el Primer Campeonato Juvenil de Básquetbol. La historia es esta: la entonces Liga Nortesantandereana de este deporte era presidida por el odontólogo Eustorgio Colmenares Baptista, acompañado por sus colaboradores, Francisco Scovino como vicepresidente, Héctor González, tesorero, Andrés Solano, fiscal y la compañía de José Vicente Diago, Fernando Ramírez y Humberto Ramírez G. como vocales. En la Secretaría, se desempeñaba Hernán González D.

A comienzos de ese año, se reunió en la ciudad de Cali la Asamblea General de Ligas en la que el delegado del departamento fue el señor Héctor González, quien hiciera la solicitud formal de asignarle a su capital, la sede del Primer Campeonato Juvenil de básquetbol, lo cual fue confirmado y ratificado en la siguiente reunión que se realizó en Bogotá, esta vez con la presencia del presidente de la liga nortesantandereana, el doctor Eustorgio Colmenares.

Era la primera vez que se realizaba en el país un torneo de esta categoría y a Cúcuta le otorgaron el privilegio, pues contaba con un moderno coliseo que había sido financiado y construido por el gobierno nacional, entonces en cabeza del general Rojas Pinilla, de ahí el nombre que se le dio y por el cual fue conocido en sus primeros años.

Además de su infraestructura, prácticamente terminada, había que sumarle el interés que demostraron los gobernantes locales y regionales, entre los que estaban, el gobernador Gonzalo Rivera Laguado y el alcalde José Luis Acero Jordán y lo principal, una liga deseosa de trabajar, llena de dinamismo y de un enorme deseo de servirle a su ciudad.

En esa época no se planificaban los eventos deportivos con los plazos con que se hacen en la actualidad, pues recordemos que eran los primeros en celebrarse. Pensar que entre la fecha de su aprobación y la de su realización sólo había unos pocos meses, así que la improvisación, en algunos casos, llevaba a la intervención personal de los comprometidos quienes entregaban sus recursos personales para respetar los plazos y las condiciones necesarias para cumplir con los objetivos propuestos.

Faltando sólo 20 días para el inicio del evento se vino a recibir los auxilios que le giraron al Departamento para la pavimentación de las vías de acceso a la cancha y sus zonas de parqueo; afortunadamente los miembros de la Liga lograron obtener los recursos apelando a créditos bancarios personales y entregándolos a las dependencias de Obras Públicas, Plan Regulador y Valorización Municipales para que se terminaran dichas obras.

En términos deportivos, para escoger el seleccionado del Norte de Santander, la Liga organizó un campeonato regional en el que participaron los siguientes diez equipos: Salesianos, Simón Bolívar, Cúcuta Deportivo, Merengues, Instituto Nariño, Guasimales, Café del Comercio, Independiente, Aguiluchos y La Salle, resultando ganador este último equipo.

Actuaba como entrenador de la Liga, el panameño August R. Kam, quien tomó bajo su mando al equipo vencedor del campeonato regional al que tuvo que dirigir y entrenar de manera intensiva. Fueron sus integrantes: Roque Peñaloza, Ciro Medina, Hernán "pipo" Gómez, Luis "primor" Colmenares, Juan de Dios "mano e´gancho" Joves, Juan Vargas, Julio César Vargas, Gustavo Martínez, Alfonso "pelícano" Rodríguez, Carlos "cabezón" Castillo.

En este Primer Campeonato Juvenil participaron los seleccionados de Atlántico, Boyacá, Bolívar, Caquetá, Cundinamarca, Huila, Tolima, Valle y los quintetos de Santander y Norte de Santander.

A la selección de Caquetá, que se presentó en representación de los Territorios Nacionales no se le aceptó la inscripción ya que no cumplía con el requisito reglamentario que los participantes debían ser oriundos de la región que representaban o al menos haber residido en ella por más de seis meses.

La Liga nombró un lujoso Comité de Recepción integrado en su gran mayoría por un grupo de damas de lo más representativo de la ciudad, entre quienes se destacaban: las hermanas Martínez Badillo, Martha Eslava de Hernández y Lola de Eslava, Martha Canal, Yesmín Colmenares, Graciela Cárdenas y Esther Ardila, acompañadas de los doctores Musa Brahim Sus, Gustavo Sandoval y Hernando Camargo Belén, entre otros.

Y no faltaron las madrinas de los equipos participantes: Atlántico, Consuelo Garbiras; Amparo Canal, Boyacá; Esther Ardila, Bolívar; Elvira Moncada. Cundinamarca; Teresa Viccini, Huila; Ligia Martínez, Tolima; Aida Cristo, Valle; Gladys Díaz, Santander y Martha Canal, Norte de Santander.

El Gobernador del departamento inauguró el torneo el 19 de diciembre y la Toma de Juramento a los participantes corrió por cuenta del capitán del seleccionado local, Roque Peñaloza. Durante diez días se produjeron los encuentros que a la postre ganó el conjunto Local. En la final se enfrentaron los equipos de Cundinamarca y Norte, con un resultado de 52 contra 34 a favor de los nuestros.

Al día siguiente se cumplió la ceremonia de entrega de trofeos, en el Club de Cazadores y la declaratoria de Campeón a la selección del Norte de Santander, hecha por el presidente de la Asociación Colombiana de Básquetbol, señor Alberto Gómez Moreno, además de la imposición de las medallas a los vencedores y al presidente de la Liga Local, Eustorgio Colmenares.

Al cierre de la jornada fueron resaltadas las palabras de Alejandro Gutiérrez Calderón escritas en su Libreto Deportivo: “(…) poner de ejemplo a unos educadores que en todo momento se han preocupado por la educación intelectual, física y moral de la juventud cucuteña, como lo han sido los Hermanos de las Escuelas Cristianas…”



Recopilado por: Gastón Bermúdez V.

1 comentario:

  1. Muy grato y reconfortante saber de los orígenes del deporte de la cesta motilón. Quiénes en más recientes épocas hemos contribuido en la formación de basquetbolistas nos sentimos orgullosos. Excelente crónica.

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