Dalia Pineda (La Opinión)
Tristemente vemos a Cúcuta como una ciudad envuelta en el caos y el
desorden. No nos sentimos seguros en ninguna parte. Y que podemos decir del
centro, en el conjunto del área urbana, que es el motivo de este artículo.
No encontramos calificativo al respecto, cuando es imposible y casi una
hazaña de valentía atreverse a pasar por las vías que rodean el centro de
nuestra amada capital.
Nuestras avenidas principales, esas que rodean el centro de la ciudad,
están invadidas en su totalidad.
No se puede andar ni a pie ni mucho menos en carro. Produce terror ir al
centro. Nosotros los ciudadanos, los que pagamos impuestos y servicios
públicos, nosotros los dueños de casa, nos sentimos impotentes ante la
proliferación de robos, sicariatos, riñas a cualquier hora del día.
Es desesperante ver inundado de gente el centro con maletas por la mitad de
calles y avenidas, sin dárseles nada, acostados en los andenes, invadiendo
totalmente el espacio público, pues tristemente a nuestra ciudad no la gobierna
nadie.
La proliferación de venezolanos se veía venir y no contamos con una
administración ni municipal ni departamental que a tiempo tomara cartas en el
asunto.
Si bien es cierto toda nuestra ciudad se puede declarar en alerta roja, el
centro es el sitio más peligroso que tenemos en estos momentos.
En navidad era un paseo ir al centro, pero esa tradición quedará como un
recuerdo en nuestra memoria, cuando veíamos llegar de todos los rincones del
país gente deseando pasar sus navidades en nuestra ciudad.
Produce tristeza ver el centro de la ciudad totalmente acabado. Ya no
tenemos donde ir a hacer nuestras compras navideñas. Y ni hablar de caminar por
el parque Santander.
Está la prevención que ese es lugar de atraco atreverse a pasar por la
mitad del parque Santander, ir por Alejandría y las avenidas que rondan el
centro de la ciudad es de valientes.
Se está acabando el año 2019 y con él una de las peores administraciones
que hemos podido tener.
No se sabe dónde está el Alcalde como primera autoridad de policía del
municipio como lo contempla nuestra Constitución en su artículo 315, numeral 2.
Esta es nuestra triste y actual realidad debemos tomarla en cuenta y ser
realistas como se encuentra para así protegernos a nosotros mismos.
Cúcuta en su totalidad debe declararse zona roja por la desprotección de
sus autoridades nuestra ciudad inundada de todo menos de nada bueno. Suena
fuerte pero, es nuestra realidad.
Hacemos votos por la nueva administración municipal actúe
devolviéndonos la tranquilidad para así volver a caminar por nuestras calles y
avenidas, sentirnos seguros en la ciudad que tanto amamos.
Será nuestro gran deseo de navidad.
Recopilado por: Gastón
Bermúdez V.
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