lunes, 18 de marzo de 2013

349.- PERSONAS DESTACADAS EN CUCUTA


Norte de Santander: Historia e identidad en su Centenario




Mons. Luis Pérez Hernández (1894-1959), estudió en el Seminario de Pamplona Filosofía y Letras. Se doctoró en Filosofía en Europa. Concluyó en la Universidad Gregoriana de Roma, los doctorados en Teología y Derecho. Fue ordenado de sacerdote en 1918. Profesor de Filosofía, Griego y Matemáticas de los Seminarios de Pamplona y Usaquén. Rector de los de Jericó y Santa Rosa de Osos. Director del semanario Popular. Secretario Privado de Mons. Juan Manuel González Arbeláez. Arzobispo coadjutor de Bogotá. Vicario General de la Diócesis de Barranquilla. Obispo Auxiliar de Mons. Ismael Perdomo. Visitador Delegado de la  Arquidiócesis de Bogotá y primer Obispo de la Diócesis de Cúcuta.

Estableció en la ciudad  varias comunidades religiosas. Fundó el semanario La Verdad y la revista Vocaciones. Creo la vice parroquia de Nuestra Señora de las angustias y proyectó las de El Salado y El Zumbador. Al sentirse enfermo se trasladó a Bogotá y cuando moría levantó la mano y dijo: Mi última bendición es para Cúcuta. Está enterrado en la Catedral de Cúcuta.


Pbro. Daniel Jordán Contreras (1894-1979), es el sacerdote que más interés  despertó entre los cucuteños en la primera mitad del siglo XX. Fue un líder en la Cúcuta de la época, que lo tuvo, por más de 40 años, al frente de todo lo que en ella sucedía. Con el apoyo de la feligresía se impuso la tarea de construir el templo de San José, frente al parque Santander.

La gente recuerda que el templo se llenaba en la misa dominical y el acceso era imposible, lo que llevó a la transmisión de la eucaristía por la Voz del Norte y a escucharse en los parlantes que para la época estaban instalados en el parque.

El sermón del padre Jordán hizo historia y fue una tradición cucuteña casi hasta su muerte. Su voz brotaba como una cascada matizada de una rica gama de tonalidades que manejaba con dominio de maestro.

Entre las múltiples ejecutorias  está la construcción del monumento a Cristo Rey y la consagración de Nuestra señora de Cúcuta como patrona de la ciudad.


Reverendo Padre Rafael García-Herreros Unda (1909-1992), sacerdote de la Iglesia católica. Humanista, filósofo, poeta, políglota, escritor, profesor de griego, latín, filosofía y arte, y predicador incansable. El padre García-Herreros fue fundador de numerosos centros educativos en todo el país y promotor de muchas otras obras sociales. Nació en Cúcuta.

Iniciador del programa el Minuto de Dios y del barrio del mismo nombre en Bogotá.

Desde 1946, en la emisora Radio Fuentes de Cartagena, comenzó a utilizar los micrófonos para su labor evangelizadora. La ´Hora Católica´ se mantuvo al aire durante cuatro años y continuó en Medellín. En 1954 al llegar la televisión a Colombia inició las emisiones del ´Minuto de Dios´ que poniendo en manos de Dios ´este día que ya pasó y la noche que llega´ se convirtió en uno de los programas más emitidos. El ´Banquete del Millón´ realizado por primera vez en 1961 fue otro de sus proyectos loables. Comprometió a altas personalidades a favor de los de menos recursos.

Falleció mientras se celebraba el Banquete en 1992 en el Salón Rojo del Hotel Tequendama.


Julio Pérez Ferrero, (1851-1927), fue pedagogo, periodista, historiador y educador. Sobrevivió al terremoto de 1875. Formó parte de la Junta Re-constructora con los distinguidos caballeros: Melitón Añez, Trinidad Ferrero, Christian Andressen Moller, Juan Atalaya, Euleterio García y Florentino González.

Integró la Junta que emprendió la construcción del Ferrocarril de Cúcuta. Uno de sus hijos, Luis, fue el primer obispo de Cúcuta.

Fue adalid del progreso de la ciudad, a la que sirvió desde diferentes posiciones. Fue Personero y Alcalde. Al crearse el Departamento de Cúcuta fue elegido como Diputado y ocupó la primera Presidencia. Resultó electo como Representante a la Cámara por el Departamento. Fue Prefecto de Provincia y ocupó en dos oportunidades la Secretaría de Educación.

Fue Rector del colegio Provincial y profesor del Seminario en Pamplona. Estableció la biblioteca departamental, que hoy lleva su nombre, y que inicialmente se llamó Batalla de Boyacá.


José Agustín Berti Aranda, (1853-1929), desde 1864 algunos parientes italianos lo llevaron a Italia y allí cursó sus primeros estudios. Se graduó de bachiller en París. Obtuvo el título de General en la Guerra de los Mil Días luchando al lado de los conservadores con Próspero Pinzón y Ramón González Valencia.

De regreso lo sorprendió el terremoto de 1875 y perdió a sus padres y cuatro hermanos. Después logró reunir el Concejo de Cúcuta, actuando como presidente. Lo acompañaron Juan Antonio Oliveros, José Mª Lazcano, Teodoro Díaz, Salvador Luciani y Ramón Mª Paz. En 1883 casó con Victoria Garbira Ferrero y tuvieron 5 hijos. Según la tradición oral, su hija Ernestina fue la primera reina de Cúcuta, elegida en las fiestas del 20 de julio de 1914.

En 1904 fue Prefecto de la Provincia de Cúcuta y participó activamente en la integración del Departamento de Norte de Santander. De 1919 a 1923 fue Senador de la República.

Según escritura Pública 829 de la Notaría Primera de Cúcuta el 17 de diciembre de 1913 vendió el terreno para la construcción del Palacio de Gobierno conocido como la Cúpula Chata, por $6.700.

En 1917 el gobierno nacional decretó por Ley 42 la construcción de la carretera Cúcuta-Ocaña. En 1918 se iniciaron las obras de exploración y en 1920 los de construcción, él fue el primer director de la obra y la inauguración se realizó el 30 de julio de 1946.

Fue el primer Tesorero del Ferrocarril de Cúcuta en 1887 y el noveno de sus presidentes. En 1913 dueño del teatro Guzmán Berti, dado al servicio público en 1878 por su constructor Domingo Guzmán, inició trabajos de mejoramiento y adaptación para proyectar cine. En septiembre de 1914 fue re-inagurado con el nombre de Guzmán Berti con capacidad para 1000 personas. La acústica era admirable por eso la preferían las empresas de drama y ópera que visitaban la ciudad.


Luis Febres-Cordero Ferrero, (1880-1927), no fue hombre de mayores títulos y academias. No obstante dada su cultura, es, entre las figuras regionales el mayor autodidacta. Dominó las finanzas, la literatura y la política. Fue el creador de la primera fábrica de cigarrillos hecho a máquina, Gran Colombia. Se desempeñó como contador del Ferrocarril de Cúcuta, fue síndico del Hospital, asumió la secretaría de Hacienda del Departamento, ocupó un curul en la Asamblea y un asiento en el Concejo. Fue gobernador en dos oportunidades.

También fue literato e historiador. Su obra histórica contribuyó a conservar la tradición, recopilando y analizando los hechos con autenticidad. El Terremoto de Cúcuta publicado por editorial Minerva en 1926, fue una contribución a la celebración del cincuentenario del movimiento telúrico.


Olinto Marcucci Ramírez, (1896-.1982), sin haber estudiado arte de la escultura, creó la primera obra, La Victoria, en homenaje a la batalla de Boyacá. El gobierno departamental la adquirió para erguirla en la Plaza de La Victoria (Parque Colón) y le otorgó una beca para estudiar en Roma.

Cursó los primeros estudios en Cúcuta al lado de don Luis Salas Peralta, luego continuó en el Sagrado Corazón de Jesús, obtuvo el grado de maestro de la Escuela Normal Superior de Cúcuta. En sus estudios en Roma fue laureado con diploma de profesor de escultura de la Real Academia de Bellas Artes de Roma.

Se casó en Roma con la bogotana María Echeverry Quijano, también artista, estudiante de pintura en la Escuela de Bellas Artes. La ceremonia fue oficiada por el Cardenal Pacelli, mas tarde Papa Pio XII. En 1926 regresaron al país y se instalaron en Bogotá.  Ejecutó varias obras: dos monumentos en Roma, uno en Costa Rica, y un busto de Kennedy en la Nasa. Es autor de esculturas en los tipos estatua y busto.


José Manuel Villalobos, (1901-1974), su mayor inclinación fue el periodismo. En 1916 estando en Pamplona colaboró en los periódicos manuscritos la Voz del Sarare y El Liberal. En 1920, ya en Cúcuta se vinculó al periódico El Día. En esa década surgió un movimiento periodístico que lo tuvo entre los principales actores junto a Leandro Cuberos Niño, Pedro Mª Fuentes y Sixto Epiménides Sarmiento.

En 1921 casó con Soledad Barradas y nacieron 3 hijos.

El 24 de junio de 1922 fundó el periódico Comentarios, vocero del Partido Liberal, que se convirtió en el centro del periodismo y la actividad política. El 24 de junio de 1963 Comentarios celebró sus 50 años.

Formó parte del Directorio Liberal, fue Concejal, Diputado, Senador de la República, Secretario de Gobierno y de Hacienda del Departamento y del Municipio, fue Alcalde de Cúcuta en dos oportunidades y presidente de la Sociedad de Mejoras Públicas.

Comenzó la modernidad del parque Santander,  y fundó la Escuela de Música. En el gobierno de Alfonso López Pumarejo fue cónsul en Ciudad Bolívar-Venezuela.

Firme en sus convicciones, honesto, digno, son calificativos de quienes lo conocieron.


Luis Parra Bolívar, (1907-1969),  la carencia de los centros de enseñanza en la región lo obligó a irse a Bogotá y comenzó a estudiar Derecho que interrumpió y se trasladó a Medellín, luego de haber trabajado en Bogotá en El Siglo de Laureano Gómez, experiencia que cimentó su vocación al periodismo. Incursionó en la política y fundó la emisora Claridad en esa ciudad de Medellín. Fue encargado de la dirección del periódico El Colombiano y logró terminar la carrera de Derecho en la Universidad de Antioquia.

Fue elegido a la Asamblea de Norte de Santander. En 1947 se radicó en Cúcuta, donde durante 4 años gestó su obra máxima, Diario de La Frontera; el 17 de de febrero de 1951, se oyó en nuestras calles por primera vez el vocerío cantando el nombre del periódico más moderno de la época. Orientó y  dirigió la acción de su partido, el conservador, al que siempre honró por su dignidad humana, el encause de sus expresiones políticas, pulcritud y transparencia. En 1949 casa por segunda vez y lo hace con doña Ligia Echeverría.

En 1976, el Diario de La Frontera celebró sus 25 años. En la celebración estuvieron presentes entre otros Alvaro Gómez Hurtado, Otto Morales Benítez y Lucio Pabón Núñez. La dirección estaba a cargo de Teodocio Cabezas Quiñones. El Diario fue por muchos años el conductor de la vida política del Departamento y sociedad cucuteña.

Parra Bolívar ocupó cargos en el Congreso de la República, Asamblea y en el servicio diplomático. Fue presidente del Club de Leones Centro, socio fundador de Andiarios y de la Casa del Periodista, 1956.


Eustorgio Colmenares Baptista, (1924-1993), odontólogo  de la Universidad de Antioquia. Contrajo matrimonio con Esther Ossa Montoya. Tuvo especial afición por el deporte, con mayor dedicación hacia la práctica del fútbol y basket. En 1958 animado por la actividad política toma parte en la fundación de La Opinión como publicación semanal en compañía de Virgilio Barco Vargas, Eduardo Silva Carradine, León Colmenares Baptista y Alirio Sánchez Mendoza. Dos años más tarde se convirtió en diario, empresa a la cual le puso la mayor atención.

En 1961 el gobernador Miguel García-Herreros lo nombró secretario de gobierno. Por un tiempo  alternó su profesión con la política y el periodismo. Fue corresponsal de El Tiempo. En 1966 el gobernador Gustavo Lozano Cárdenas lo nombró Alcalde de Cúcuta durante 4 años. Durante su gestión se cedieron los terrenos para la construcción del INEM, la UFPS, la Aduana Nacional, el Instituto del Niño Retardado Mental, el Hospital Erasmo Meoz y el Colegio Nacional de Periodistas. En 1971 fue Secretario General del Ministerio de Comunicaciones.

Desde la Opinión proyectó su pensamiento político y sus querencias por Norte de Santander y Cúcuta. Sencillo y humilde como su origen, posteriormente abierto a la comprensión de hechos y problemas, prefirió no más acceder a cargos de servicio público. En 1993 fue asesinado por sicarios del ELN. Era un cucuteño típico.


Pedro Felipe Lara (1882-1959), al morir su padre en 1903, se puso al frente de las haciendas Orope, Carrillo y otra, en lo que hoy es el barrio Blanco. En 1910 casó con María Hernández Ramírez. En 1918, destiló aguardiente, empresa que se convirtió como Jaramillo, Salazar y Lara, una de las primeras incursiones en el sector empresarial. En la hacienda Carrillo explotó carbón, pero también creó una fábrica de azúcar con maquinaria traída de USA. Sin embargo la escasa producción de caña lo llevó a vendérsela a los azucareros del Valle del Cauca, 1947, quienes se llevaron la infraestructura. Entre sus industrias destaca Telares de Cúcuta, fábrica de 120 obreros que producía driles, mantas, telas para camisas y otros textiles.

En 1921 se construyó el acueducto Lara que perduró hasta finales de los 40. En 1929, inició la producción de baldosines, tubos de concreto, arcilla y otros. En 1928 compró los terrenos de la hacienda La Garita situada en la calle 10, desde la avenida 3ª hasta la avenida 0 (barrio Latino), por donde antes bajaba el río Pamplonita, su intención era urbanizarla para formar allí el primer barrio residencial de la ciudad.

También fue empresario de teatro, en 1931 compró el Teatro Santander a Luis Alberto Marciales. Luego construyó el Buenos Aires en el barrio Carora, el Aire Libre en la calle 10 y el Miraflores. Construyó el Gran Hotel, 1938, la pensión inglesa, el hotel Atlántico y el edificio Lara.

Todo lo efectuado lo colocan como un verdadero pionero de la industria en la ciudad y en el departamento. Fue un precursor, un visionario, un hombre de acción.


Aziz Abrajim Elcure, (1895-1976), libanés que en 1912 llegó a Colombia al amparo de su cuñado Jorge Cristo. Se estableció en Chinácota. Vivió algunos años en Bucaramanga, pero se radicó en Cúcuta a mediados de la segunda década del siglo XX. A mediados de los 30, comenzó su actividad comercial con el almacén La Artística donde comercializó telas y vidrios. Fundó diversas industrias en la ciudad, una de ellas dedicada al curtiembre de cueros en El Salado.

A mediados de los 40, con Luis Francisco Eslava y Gilberto Clavijo fundó una fábrica de hielo. En 1956 compró una hacienda en Cornejo, siendo pionero en los cultivos de arroz y caña de azúcar con la Sociedad Agropecuaria y Cía. Otra de las empresa fue la Sociedad El Resumen Ltda., en asocio con Jesús Atehortua, también dedicada a la siembra de arroz. En Bucaramanga junto con Leonidas García, fue propietario de la arrocera Molinos Zulia.

A finales de los 50 en la esquina de la calle 18 con avenida 2E, inauguró el Molino Cúcuta, dedicado a beneficiar los cultivadores de arroz. Posteriormente lo trasladó a la carretera que une a Cúcuta con El Zulia. La maquinaria fue importada de Inglaterra y se convirtió en el primer molino técnico y moderno de la ciudad.

Años después, orientó su actividad empresarial hacia la arcilla. Fundó el Tejar Santa Teresa que al comienzo del siglo XXI es uno de los de más prestigio en la región. Su amor por Cúcuta se deja ver en los nombres que ha colocado a las diferentes empresas de su propiedad. La mayoría llevan el nombre de la ciudad.

Las donaciones en terrenos y apoyo de toda índole, han hecho florecer capillas, iglesias, centros de atención en salud como el caso de los terrenos cedidos para el Centro de Rehabilitación San José. La urbanización La Ceiba, cuyo nombre respetó el honor de la tradición local, se caracteriza por la amplitud de las calles y zonas verdes.





Recopilado por: Gastón Bermúdez V.

2 comentarios:

  1. El nombre correcto del escultor Marcucci Ramírez es Olinto y no Alonso como quedo reseñado.

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