miércoles, 30 de octubre de 2024

2511.- CUCUTA DEPORTIVO 2023, MEJOR COPA COLOMBIA

Gustavo Contreras Sabogal (La Opinión)


Pese a terminar decepcionando en la temporada al no lograr ascender, Cúcuta Deportivo sorprendió en 2023 y tuvo su mejor participación histórica en la Copa Colombia alcanzando la instancia de semifinales.

El certamen, que reúne a los equipos de primera y segunda división del fútbol nacional, fue una vitrina para los rojinegros que superaron a cinco rivales antes de caer versus Millonarios. Entre sus víctimas se encuentran los recientes finalistas Medellín y Junior.

El motilón, nunca antes, había alcanzado unas semifinales en esta competencia creada en 2008. Sus actuaciones más sobresalientes fueron en 2010 y 2012 cuando logró instalarse en cuartos de final.

La campaña del fronterizo impulsó a que en la más reciente asamblea de Dimayor se cambiara el premio deportivo al campeón de la Copa que, hasta esta temporada, daba un cupo a la fase previa de la Copa Libertadores. Desde el próximo año otorgara clasificación a la Copa Sudamericana.

Y es que, de Cúcuta haber sido campeón, no podría ir a Libertadores sino ascendía, pues por reglamento colombiano ningún equipo de segunda división podrá representar al país en el máximo torneo de clubes del continente.

La participación por poco iguala a lo hecho por Itagüí en 2010, cuando militando en la B, fue subcampeón.

Jhonathan Agudelo, capitán del equipo, fue el goleador del Cúcuta en esta edición marcando cuatro goles: Once Caldas (1), Deportes Quindío (1) y Junior FC (2).

Once Caldas, primera víctima

En la primera ronda, Cúcuta Deportivo fue emparejado con Once Caldas. El equipo manizaleño llegaba como gran favorito al tener en su nómina nombres como los de Dayro Moreno, Luis Miranda, Jhon Pajoy, entre otros, con la conducción técnica de Elkin Soto.


Los motilones, al mando de Bernardo Redín, fueron contundentes en el partido de ida disputado en el General Santander ganando 3-1 gracias a los goles de Jefry Zapata (2) y Jhonathan Agudelo. Por el blanco descontó Jorge Cardona.

En dicho juego de febrero, vivieron sus primeros minutos en el profesionalismo Eris Viera y Juan Pablo ‘Papayo’ Ramírez.

En la vuelta, jugada en el Palogrande, el Once venció 1-0 (gol de Alejandro Artunduaga), pero no le alcanzó para forzar la serie a los penales.


Triunfo en Armenia y clasificación

En la fase dos, Cúcuta eliminó a Deportes Quindío con un marcador global de 2-0 que fue logrado en el Centenario de Armenia. Joider Micolta y Agudelo dieron el triunfo en el primer juego.

En el cierre, en el ‘Coloso’ de Lleras empataron 0-0. A falta de 10 minutos, Redín permitió el debut del arquero cucuteño Sergio Avellaneda, quien reemplazó a Wilder Mosquera.


Alcanzó la ventaja lograda en Cartagena

Real Cartagena fue rival en la fase tres. Al igual que en la ronda anterior, bastó con la victoria en el partido de ida para lograr la clasificación. Los fronterizos se impusieron 1-0 en el Jaime Morón con gol de Yilmar Filigrana tras centro del cucuteño Kevin Álvarez.

En el General Santander empataron 0-0.


Sorpresiva clasificación ante Junior

En el papel, Cúcuta terminaría su paso por la Copa Colombia en los octavos de final, cuando se conoció que Junior FC sería su contrincante. Bajo la batuta de Hernán ‘Bolillo’ Gómez y el liderazgo de Carlos Bacca, el ‘Tiburón’ era un claro favorito.

Pero el rojinegro, que en aquel momento era dirigido por el argentino Rubén Tanucci, demostró que tenía plantel para dar pelea. En el primer juego –en la capital nortesantandereana- el local venció sorprendentemente 4-3 con tantos de Emanuel Olivera (autogol), Agudelo, José Estupiñán y Lucas Ríos. Por Junior celebraron Gabriel Fuentes, Pablo Rojas y Bacca.

En la vuelta, disputada en el Metropolitano, el rojiblanco ganó 2-1 (Bacca y ‘Cariaco’ González, por Cúcuta Agudelo) forzando la serie a la tanda de penales.

En la definición, el motilón venció 4-3. Ezequiel Mastrolía fue la figura atajándoles cobros a Vladimir Hernández y Pablo Rojas. Juan Pablo Díaz, Andrés Peralta, Mauricio Duarte y Juan Moreno cumplieron en sus ejecuciones.


Batacazo en el Atanasio

Tras la sorpresiva clasificación en el ‘Metro’, Cúcuta daría otro golpe a nivel nacional al sacar a Medellín, también en penales (5-4), en el Atanasio Girardot. El cancerbero Mastrolía también figuró al atajar el último cobro a Diego Moreno.

La serie de cuartos de final inició en la frontera con victoria para el ‘Poderoso’ 1-0 con tanto del argentino Luciano Pons. En la capital antioqueña, el motilón llevó la serie a penales tras sobreponerse 2-1 (Jefry Zapata y Joider Micolta).

En esta instancia, Federico Barrionuevo era el estratega motilón tras la salida de Tanucci.


Lucha ante Millonarios

En semifinales, Cúcuta terminó su mejor campaña al caer a manos de Millonarios, en su momento, vigente campeón de la Liga.

El fronterizo batalló e hizo ver feo al capitalino que recurrió a la pérdida de tiempo en la vuelta jugada en el General. La semifinal se abrió en El Campín con resultado a favor 1-0 del azul con tanto de Leonardo Castro.


En el juego definitivo, el rojinegro empató rápido la serie con un golazo de Peralta (17’), pero antes de finalizar el primer tiempo Daniel Ruiz decretó el 1-1. En la parte complementaria el azul fue marrullero y aguantó su ventaja avanzando a la final.





Recopilado por: Gastón Bermúdez V.

lunes, 28 de octubre de 2024

2510.- 42 MEDALLAS, N. DE S. EN PARANACIONALES, 2023

La Opinión


Con un total de 42 medallas, Norte de Santander finalizó su participación en los Juegos Paranacionales del Eje Cafetero 2023. Los rojinegros culminaron en la casilla 18 del medallero entre 26 delegaciones que logaron subir al podio.

Valle del Cauca, como en las justas convencionales, también fue la ganadora con un registro de 408 medallas (171 de oro), Bogotá fue segunda (351) y Antioquia tercera (228).

El balance para la delegación fronteriza tiende a ser positivo con tres oros, 17 platas y 22 bronces, pero no supera lo hecho en Bolívar 2019 cuando Norte fue décima con 45 medallas (10 oros, 13 platas y 22 bronces).

Tres campeones

Las estrofas ‘Del Norte bravos hijos’ sonaron en tres oportunidades en las disciplinas de boccia, billar físico y paratletismo.


Jesús Romero se consagró campeón en boccia categoría BC3. Tuvo un camino victorioso imponiéndose 9-0 ante el representante de Córdoba, 8-0 a Caldas, en semifinales 8-0 a Cundinamarca y en la final venció 3-2 al boyacense Cristian López.

Romero era garantía de medalla recordando que en 2019 se colgó dos preseas y hace un par de semanas obtuvo bronce en los Juegos Parapanamericanos de Santiago 2023. En el Eje también fue ganador de la plata en la prueba mixta.

En billar físico, Julián Muñoz fue dueño de la dorada en Pool bola 8 sentado. En su recorrido triunfal pasó a Caldas (2-0), Santander (2-1), Risaralda (2-0), Emiro Jaimes de Norte (2-0), Valle del Cauca (3-1) y en la final 3-0 a Luis Roldán de Risaralda.

En salto largo, Juan García fue el primero con una marca de 3.90 metros, categoría II2.

Segundos lugares

El equipo de baloncesto en silla de ruedas no pudo revalidar su título de 2019 y tuvo que conformarse con la plata al perder la final 66-45 ante Valle del Cauca, que contó con el cucuteño Jhon Hernández.

En BSR, Norte no pudo defender su corona conseguida en Bolívar 2019.

En el segundo lugar también quedaron los equipos de ajedrez femenino en auditivo y físico PC, baloncesto auditivo femenino, fútbol auditivo masculino, futsal auditivo masculino, relevos 4x400metros femenino categoría T15, billar tres bandas sentado y carambola libre sentado masculino, y boccia mixto BC3.

María Mogollón fue doble medallista en ajedrez (activo y clásico) en físicos PC, Jenifer Cano en clásico auditivo, Hernando Puerto en billar prueba tres bandas de pie, María Moreno en 800 metros T15, Juan García en impulsión de bala II2 y Yeimer Guerrero en salto largo T36.

Al podio

Los equipos que lograron bronce fueron dobles B1 en bowling visual, relevo 4x100m femenino (T15) y tenis de mesa masculino auditivo.

Ciro Porras, ajedrecista de Norte de Santander ganador de bronce en clásico individual auditivo.

A nivel individual, en ajedrez aportaron Nubia Tarazona (activo y clásico) en físicos PC y Ciro Porras en clásico individual auditivo. En billar, Eduardo Domínguez en carambola libre de pie, Hernando Puerto pool bola 8 de pie y Pablo Ortega tres bandas sentado. En paranatación Josué Berjel en 100 metros pecho SBII1 y Moisés Sánchez en 50 metros espalda S3. En bowling visual, Adolfo León fue tercero en sencillos y todo evento. En boccia, Juan Correa en individual BC2. En tenis de mesa auditivo, Kevin Ayala en sencillos.

En paratletismo se obtuvieron bronces en diferentes modalidades: María Moreno (1.500 metros y 400m T15), Jefferson Casadiego (200m T37), Franklin Lache (impulsión de bala F33), Deisy Bayona (lanzamiento de disco T15), Liseth Fuentes (lanzamiento de jabalina F41) y Josué Arévalo (salto largo T13).




Recopilado por: Gastón Bermúdez V.

sábado, 26 de octubre de 2024

2509.- CUCUTA TERMINO CON SU SEGUNDO SUBTITULO, 2023

Gustavo Contreras Sabogal (La Opinión)


Cúcuta Futsal, en 2022, también fue subcampeón. En esta temporada cayó ante Independiente Barranquilla con un global de 9-7.

Cúcuta Futsal estuvo cerca de firmar una remontada épica en la final de la Liga II-2023 ante Independiente Barranquilla, pero le faltaron dos goles para forzar a una tanda de penales la definición por el título.

Los rojinegros, que en el Baby Rojas de la capital atlanticense perdieron 7-0, ganaron 7-2 en el coliseo ‘Toto’ Hernández dejando un global de 9-7 y quedando otra vez con las ganas de gritar campeón, puesto que en 2022-II también fueron segundos al caer ante Leones de Nariño.

Un doblete de Jhon Deivi Delgado y goles de Luis Ariza, Michael Gelvez, Yairon Palencia, Brayan Montaño y Ruber Bedoya ilusionaron a los cerca de 2 mil asistentes. Anthony De la Ossa, que en la ida anotó cinco goles, marcó los tantos del cuadro costeño que alcanzó su primera estrella.

“Queda uno con un sinsabor al perder la final en casa, pero sabíamos que teníamos que trabajar demasiado porque teníamos al frente a jugadores de mucha experiencia. Se logra hacer un buen papel, pero desafortunadamente no cumplimos el objetivo”, afirmó Ruber Bedoya, capitán de los fronterizos.


Pese al resultado, el subcampeonato revalida que Cúcuta Futsal –que juega con la ficha de Estrellas del Deporte- lleva un proceso deportivo serio de la mano del entrenador venezolano Freddy González con dos subtítulos (2022-II y 2023-II) y unas semifinales (2023-I).

“Es un proyecto que se creó hace dos años, venimos trabajando de buena manera. Las sensaciones son buenas para el plantel y la afición. Sabemos que el otro año esta copa no se nos escapará nuevamente”, resaltó Bedoya, quien cerró el semestre con 12 goles.

Final vibrante

González formó con Aldair Álzate; Mario Ramírez, Ruber Bedoya, Yairon Palencia, Brayan Montaño, dejando en la rotación al pivot Jhon Deivi Delgado, convocado a la Selección Colombia.

Clemente Rozo, Luis Ariza, Adrián Contreras, William Univio y Delgado, los que más vieron minutos desde el banco local.

El quinteto de Álvaro Lance saltó al maderamen con Andrés Matos; Jorge Cuervo, Jhony Ramírez, Anthony De la Ossa, Andrés Villa. Desde el banquillo entraron reiteradamente Javier Garcés, Eduardo Medina, Reynaldo Carranza y Adrián Angulo.

Intensidad y goles

Tal como se esperaba, Cúcuta Futsal fue agresivo desde el comienzo ante un Independiente que, si bien no se resguardó, si entró con una dinámica de espera.

En los primeros minutos, la visita tuvo como figura al cancerbero Andrés Matos, quien atajó de todo y parecía invisible en su arco.

Pero fue tanta la insistencia de los rojinegros que el marcador se abrió. Clemente Rozo, por izquierda, desbordó y envió un pase al otro frente donde llegó Luis Ariza para empujarla cuando corrían siete minutos.

Segundos después, el ataque fue el mismo, pero con perfiles invertidos. En la definición cumplió el venezolano Michael Gelvez.


Con el ánimo de los hinchas y una evidente envión, los fronterizos encontraron el 3-0. En una mala salida del cuadro costeño, Delgado anotó dentro del área con un derechazo inatajable cuando corrían 10 minutos.

Cuando las distancias se recortaron, el mejor jugador de la serie, De la Ossa descontó tras empujarla luego de un pase que lo dejó en solitario.

Aprovechando un descuido de Matos, Yairon Palancia celebró al disparar un balón de saque de esquina que en el camino se desvió al rozar a De la Ossa.

El ambiente se caldeó tras un roce entre Bedoya, quien estuvo sobre revolucionado, con un rival. Parte de la delegación barranquillero estuvo detrás del banco y en dicho momento intervinieron lo que provocó una reacción de los seguidores locales.

Antes del descanso, De la Ossa volvió anotar tras un ataque por derecha de Jhony Ramirez dejando un 4-2 al finalizar el primer tiempo.

Matos, figura

En la segunda parte, Cúcuta no fue efectivo en tres oportunidades donde Matos estaba sin opciones de atajar.

Bedoya, con un derechazo a borde de área, venció a Matos firmando un 5-2 cuando faltaban menos de 10 minutos.

El arquero de la Selección Colombia tuvo un destacado rendimiento sacando disparos de media distancia y duelos con grandes achiques.

“Toda Colombia lo vio, buscamos intentamos por todos los medios, pero ellos contaban con esa estrella que los ayudó a lo último. Matos hizo un papel muy bueno, salvó a su equipo, así es esto, a pasar la página y seguir trabajando”, analizó Bedoya.


Los rojinegros siguieron descontando y esta vez con una combinación entre Palencia y Montaño, ambos con proceso en la ‘Tricolor’. El 6-2 llegó cuando el reloj marcaba que restaba por jugar 8:08”.

A menos de 5 segundos, Delgado marcó el 7-2 al aprovechar un balón en la línea luego de un remate fuerte que Matos no pudo atajar del todo. El pivot fue el goleador del equipo en la Liga con 14 anotaciones.

“Contento porque uno de mis objetivos era aportar mi capacidad goleadora. Quedamos cortos para ser campeones, pero el próximo año va a ser”, dijo el cucuteño.

Delgado, un potente atacante con pasado en Inter Cúcuta, analizó la serie final y resaltó que los errores en la ida costaron el título.

“Se acaba triste porque fue un año en el que estuvimos siempre arriba. Perdimos la final en Barranquilla donde cometimos muchos errores y eso nos pasó factura. Acá (Cúcuta) dimos el 100%, esperamos tener revancha”, expresó Delgado.


El caminar de Cúcuta

Cúcuta Futsal tuvo una primera ronda impecable. En la fase de grupos fue líder del Grupo A con 19 puntos producto de seis victorias y un empate.

En octavos de final eliminó al Club D’Martín en una serie que terminó 4-4 y en penales ganó 3-1. En los cuartos cobraría revancha con el vigente campeón Bogotá Élite, quien lo superó en las semifinales de la Liga I, venciendo en la serie 14-9.

En semifinales despidió a Leones Itagüí (8-5) y en la final cayó ante Independiente Barranquilla (9-7).

Nómina: Jugadores: Aldair Álzate, Jhon Delgado, Ruber Bedoya, Yairon Palencia, Brayan Montaño, Mario Ramírez, Luis Ariza, William Univio, Michael Gelvez, Clemente Rozo, Adrián Contreras, Juan Jaimes, Juan Julio, Jackson Tarazona, Yelsin Santiago, Lionel Medina, Johan Peñaranda, Jean Ibarra, Ender Vielma y Edilson Torres.

Cuerpo técnico: Freddy González (director), Jonathan González (asistente), Humberto Suárez (preparador físico), Karen Vega (fisioterapeuta) y Fredy González Flórez (delegado de campo).




Recopilado por: Gastón Bermúdez V.

jueves, 24 de octubre de 2024

2508.- BARRIO POPULAR A SUS 80 AÑOS

Huellas presentidas

Pablo Tarazona Montañez (Revista Semillas)

Vista aérea del barrio Popular, al final de la década de los años cincuenta del siglo pasado. Nótese no existía todavía el barrio La Ceiba. Alcanza a salir la plaza de toros construida al lado del colegio La Salle. Se aprecia la avenida Gran Colombia y la diagonal Santander.


El tranvía subía por la avenida 7ª. hasta la calle 10, luego de salir de la Estación Central, ahí tomaba en dirección oriente a la estación Rosetal, situada en la Quinta Ascensión, casona añeja devenida en restaurante y centro de agasajos, de donde partía el Tren de la Frontera, por entre tierras de labrantío, recorría algo más de 2 Kms. hasta el río Pamplonita, y sobre el trazo de la vía férrea, se localizó la avenida Gran Colombia, que atravesaba feraces tierras de la vega izquierda del río, las cuales en su carácter de zona su-urbana, eran aptas para el desarrollo de proyectos de vivienda.

Siendo ellas servidas por la cinta asfaltada, que, aunque estrecha, definía en su longitud el hilo conductor, del cual se colgaron el Popular y a continuación el Colsag; el primero por iniciativa del Municipio y el ICT (Instituto de Crédito Territorial) y el segundo por iniciativa privada de las compañías petroleras, y continuaba hasta el puente Araújo, único paso del río en dirección a la frontera.

Antes del viaducto, se desviaba a la izquierda en dirección norte, la callejuela que conducía a las haciendas San Eduardo y Quinta Pamplonita, que fueron: la primera de los Alvarado Omaña y luego José Alejandro Rojas y la segunda de los Cote Corral, tierras dedicadas a la ganadería y a diversos cultivos; terrenos que atravesábamos en los años 50 en nuestros paseos al río con sancocho incluido, para lo cual era menester completar el bastimento que traíamos de nuestras casas, con la gallina que se nos atravesaba y la pesca en el pozo de recreo.

El ICT también tuvo extensos terrenos que sirvieron para posteriores asentamientos en torno a los desarrollos viales de esta margen, que dieron continuidad a los originales del Popular y el Colsag.

Que grato, volver a la tierra, porque ella no nos olvida, hemos sido parte de su corazón y su caricia y agradecimiento es inigualable. Así no estuviéramos en ella, el espíritu recorre sus calles, llenándose de su calidez ratificando en los conocidos un nuevo deslumbramiento, nos reconocemos en ello, doquier que nuestros pasos nos guíen.

El alma transita por las calles, alimentándose del paisaje y el calor de los días que, cantan como la cigarra en su canícula tropical, calentando el corazón como otros días. Los sentidos se avivan a su contacto, y el sabor y los olores atávicos, se adueñan de nuestras utopías, que evocan la ciudad y el barrio de épocas pretéritas.


Los vientos juegan con nuestros sueños y nos ayudan a barrer las nubes, cuyo recuerdo evitamos, y aligeramos el ambiente de tal manera que, nuestros pensamientos vuelan como cometas en busca del destino que una vez vislumbramos y hoy, es la realidad tangible y vital que nos hace rememorar aquellos tiempos que ayudaron a formar nuestra conciencia y nuestro ser.

Los frutos se deshacen en nuestras manos y se vuelven aromas y esencias de mangos, de icacos, de hobos, de nísperos y de mamones, que, le daban sentido y sabor a nuestras vidas, haciendo más placentero el trasegar por la zona de monte que rodeaba el barrio, la cual facilitaba con su verdor y riqueza natural el buen clima, que, favorecía las casas que se iban construyendo.

Los terrenos al ser de vega del río, con vocación agrícola de haciendas feraces, favorecían la humedad de la tierra y los dendritos ayudaban a refrescar el aire, paliando la canícula.

Los suelos gravo-arenosos, de fácil drenaje, expresaban en la superficie las cicatrices de las "tomas", que, son el sentido coloquial de los dendritos característicos de estos acuíferos, que, aflorando a ambos lados de la vía, desecaban los terrenos del Popular hacia el Norte y del Colsag hacia el Sur, con la cinta vial como parte-agua.

BARRIO POPULAR 1944-2024

Los recuerdos de mi valle de sol, mangos y vientos, se confunden con los de los solares del barrio Popular, cuando la vida discurría en un entorno casi de monte, casi de ciudad.

Era en mi memoria, un mosaico de gres y tejas terracota, colgado de la cinta asfaltada que, a toda su longitud exhibía un retroceso de tierra por los 2 lados y cuyo significado urbanístico comprendí más adelante, y de esa cinta negra en forma simétrica se fueron colocando las casas, unas al norte después de la Diagonal Santander, y otras al sur, después de la avenida, eufemismo que le dábamos a una serie de cárcavas que servían de desagüe de las aguas lluvias y después supimos se llamaba avenida 6E y era la vía terminal del ‘Barrio Pop’.

El paisaje era sugerente en la época en que las brisas del Pamplonita eran nuestro natural abanico y aún sin existir la malla verde consolidada, el benigno clima hacia placentero caminar entre ese vecindario variopinto, en tanto las noches eran apacibles, y su conticinio era templado y agradable al espíritu.

La nostalgia memoriosa trae la imagen de las grandes casas en el comienzo del recorrido que iniciaba en nuestra Diagonal con el Club de Cazadores y la Fundación Barco al frente, que abría en la llamada avenida Gran Colombia, la visión al proyecto inicial del ICT, para dotar de buena vivienda a los citadinos cuya familia crecía al ritmo de la economía popular.



Después de la estación de servicio Rosetal, se oía el crepitar de las botellas, en la cinta de producción de Coca-Cola, para continuar con el Castillo de San Jorge construcción altisonante en el conjunto, y el cual recuerdo haber admirado en mi niñez, cuando acompañaba a mi madre a visitar a Gertrudis González de Granados, y antes de eso el sitio donde conocí el hielo, pero sin pelotón de fusilamiento.

Continuaba este periplo con las casas primigenias donde el siempre presente Carlos Ramírez París, nuestro popular ‘Trompo loco’ iniciaba Radio Guaymaral, frente a terrenos de la ya mentada Fundación Barco y en los cuales se había habilitado la popular cancha de fútbol de la Coca Cola, hoy Palacio de Justicia, y de cuya esquina hacia el norte emergía la zona verde central, nuestro parque, con su memoriosa piedra, y cuyo misterio solo nosotros éramos sus depositario, y a su alrededor se cimentó el Salesiano y la escuela de niñas que devino en el colegio Mercedes Abrego, bajo la férula de órdenes religiosas que, han dado significado al contenido educativo y señorial de sus discípulos.

No puedo dejar pasar por alto la creación de la institución lasallista, la cual simboliza con los nombrados, la vocación que desde los 50, signó el desarrollo urbanístico hacia el occidente y el norte de nuestro barrio, hoy octogenario.

Siguiendo nuestro viaje de sueños, encontramos la manzana B, y su primer hito esquinero es el abasto o la tienda de Alejandro y Albertina Lizarazo, acompañados de su prole y su perro Anzor. Su nombre tiene 80 años como los sauces que se lo prestaron.

Por esa misma manzana en pos de la avenida, y en sentido oriente, surgió el local de doña Tomasa, Las Ondas Sevillanas, punto de encuentro de propios y extraños, de godos y cachiporros y de obligada visita de los políticos rojos que, a la ciudad arribaban. De profunda raigambre gaitanista, la muchachada del barrio disfrutaba de los dulces que prodigaba en sus reuniones políticas, siempre acompañadas de convites opíparos.

Es en este punto donde la memoria dibuja el trazado simétrico y colonial, dotadas de los servicios públicos disponibles para la época y cuyo último adelanto era el teléfono, con generoso antejardín, amplios andenes y vías pavimentadas a medida de la expansión urbana, para el tráfico vehicular, ortogonales y con dimensiones que facilitaban el desplazamiento vehicular y distinguen la movilidad del conjunto de urbanizaciones posteriores.

Aquí hago un compás de espera, pareciera que el barrio me hablara, pero son mis silencios los que hacen posible su voz, y cuenta de los 4 palos (cancha callejera en la vía), y del vecindario que fue afincando sus reales, para conformar hacia el norte, lo que hoy es el ‘Barrio Pop’.

GALERIA DE FOTOS DE ALGUNAS FAMILIAS

La pareja de esposos Hernández Sánchez. 
Habitó en una casa al frente de la manzana D avenida 5E.
Al fondo El Salesiano, 1950, recién construido.

Fuentes antiguas en el parque, familias Otero Hernández y Granados, 1950

Casa de don Pío Durán y señora Clarisa Méndez, padres de German y Jairo, años 40.

Hermanas Capacho, hijas de don Arturo Capachp y doña Zenobia.

Frente de casa tipo, manzana D, década de los 50. Familia Capacho.

Don Juan Tomás Sayago, sobrino de las hermanas Bautista terratenientes 
dueñas de hacienda cañera de la zona.

Familia de don Juan Tomás Sayago: Izquierda, Juan José, detrás Fidelia y Leonor, 
Derecha, doña Teodosila Morales, Margarita, Hortensia, Ana Elvira y Gloria.

Casa de los Sayago Morales, hoy Funeraria Los Olivos, años 50.

Familia Zafra Rincón, manzana D casa 1, Adriano, Jorge, Pacho y otro y papá Francisco.

Familia Bonells Rovira, finales de los años 40, manzanas D3 y D4.

Casa de Tulio Ibarra, tío de Anita Ibarra, después de don Benito Neira años 50,
familia Neira Rey: José, Rafael y Gabriel, hoy Davivienda.

Anita Ibarra, primera reina de la frontera,
se casó posteriormente con José Urbina Amorocho, año 1961.

Familia Tarazona Montañez, año 1958. 
José Pablo, doña Ramona, Liliana, Alfredo y don Alfredo.
Un fotógrafo suizo o austriaco, tomaba fotos en blanco y negro y las coloreaba a mano.

Recuerdo del matrimonio entre Graciela Moros Peña con Guillermo Parra 
en la casa de los Moros Peña en la Av. 5 No. 7E-40. 
Contrayentes acompañados de don Sandalio Moros López y doña Ida Peña de Moros. 
Aparecen entre otros los esposos Blanco Marciales con su hijo, 
Josué Guillermo Canal Ramírez y Nelly Moros Peña, 
hermanos Soraida, Isaura y José Gonzalo (en cuclillas) Moros Peña, 
los hermanos Villarraga y Eduardo Parra hermano del contrayente.

En las dos fotos anteriores, doña María Ramírez Peñaranda de Canal con sus nietos
 Gonzalo, Leonardo y Alfredo Canal Mora hijos de Gonzalo Canal Ramírez e 
Isabel Mora, Rocío y Marinita Canal Jordán hijas de Mario Canal Ramírez 
y doña Marina Jordán de Canal, en la casa de estos últimos, Av. 5E No.6-35.

Importancia del barrio

Jorge Maldonado Vargas (Revista Semillas)

Mapa de las comunas de Cúcuta y ubicación del Barrio Popular en la Comuna 2.

Hacen falta una buena cantidad de cuartillas para escribir todo lo que ha representado el Barrio Popular, en la Planeación y desarrollo de uno de los conglomerados populares más queridos y añorados por la comunidad Cucuteña.

Comenzamos por decir que corría el segundo mandato de Alfonso López Pumarejo (1942-1945), como presidente de Colombia, quien tenía claro que durante su periodo de gobierno debería mejorarse la vivienda de los trabajadores en el país.


En Norte de Santander y en Cúcuta, bajo el mandato de Manuel José Vargas como gobernador y Gonzalo Neira Díaz como alcalde militar de la ciudad, socializó mediante sendos comunicados a la opinión pública, la posibilidad de agrandar la ciudad, bajo la construcción de un conglomerado de casas en un lote de terreno distante del centro que se denominaría “Barrio Popular”, dedicado a la gente de más bajos recursos económicos y para ello, puso a disposición el lleno de los formularios de solicitud.

Se dispuso de la construcción de las primeras 50 casas distribuidas en cuatro manzanas que se denominaron A, B, C y D. Grato es recordar la ubicación de esas 4 manzanas:

A, se identifica exactamente como la manzana que queda en frente actualmente del Palacio de Justicia, y en ese entonces la manzana donde quedaba radio Guaymaral o la Quinta San Jorge.

Colegio Salesiano.

Palacio de justicia.

La manzana B, que queda enfrente actualmente de la funeraria Los Olivos, antiguamente identificada como la casa de Don Juan Tomas Sayago y su familia.

C, la manzana que colinda con el colegio Salesiano, la iglesia María auxiliadora y el parque del barrio.

Iglesia María Auxiliadora

Y la D, la manzana que colinda actualmente con el colegio San Francisco de Asís, antiguo Mercedes Abrego y el parque del barrio.

La construcción del colegio salesiano, la iglesia de María auxiliadora, el colegio La Salle, cuya entrada principal es por el barrio Popular, el colegio mercedes Abrego, actualmente San Francisco de Asís, el Club de Cazadores, la embotelladora Coca-Cola de esa época, y la Fundación Virgilio Barco Vargas, todas estas construcciones realizadas a principios de la década de los años 50 del siglo pasado, ratifican la importancia de este sector popular con la ciudad.

Tuve la fortuna de vivir 12 años en el barrio (1950- 1962), pero mi cordón umbilical está allí, con el grato recuerdo del transcurrir de la niñez y juventud, bajo la rígida enseñanza de la comunidad salesiana y los hermanos cristianos del colegio La Salle.

Familias enteras, algunas de ellas en la tercera y cuarta generación, han hecho que la historia de este barrio se alargue, por la presencia de gente, decente, honesta, trabajadora que disfrutan de un sector de la ciudad, ordenado, limpio, pujante, decente, incrustado en un principio lejos del centro de la ciudad pero que está a 5 minutos del parque Santander, de la Alcaldía y de la catedral San José.

Josué Canal Ramírez con Nelly Moros de Canal, enfrente de la casa de sus padres,
don Sandalio Moros López y doña Ida Peña de Moros.

Gratos recuerdos dejan familias que aun pese al paso del tiempo son la representación viva del amor y cariño de quienes habitan: Los Santos, los Tarazona, los Corzo, las Molina, los Villamizar, los Sayago, los Vivas, los Capacho, los Otero, las Vera, los Díaz, las Ramírez, las Ibarra, los Fuentes, los Suarez, los Bonells, los Andrade, los Neira, las Lizarazo, los Elcure, Chacón, los Mora, los Moros Peña, los Bueno, los Mancilla, las Cruz, los Arana, los Jaimes, los González, Los Porras, los Maldonado, los Rey Prada, los Moreno, doña Tomasa.

Y como no acordarnos del Liceo de don Arturo Jaimes y doña Margarita, que, al principio de la década de los años 50, nos enseñaron las primeras letras. Posteriormente en la década de los 60 aparece la escuela de la señorita Ana Rita “Liceo María Goreti”.

Capítulo aparte merece Amira Vargas, quien durante los últimos 50 años - murió 2022 -, fungió como la alcaldesa del barrio. A ella recurrían todos y sin ser de la junta de acción comunal - nunca lo quiso ser - resolvía y enfrentaba todos los problemas del barrio.

El trazado del barrio es perfecto, sus calles amplias y bien pavimentadas, quizás guardarían mucho más su belleza con una inversión en el mantenimiento de las mismas.

El parque es un sitio de distracción extraordinario, sus habitantes lo utilizan para caminar, pasear a los niños y hacer deporte. Con una cancha de baloncesto bastante concurrida, la misma que ha visto crecer deportivamente grandes figuras del deporte insigne de nuestra región.
La vegetación y el cuidado de los árboles ha sido prioridad para sus pobladores. Desde la misma creación del barrio año 1944, el mantenimiento de los árboles ha sido prioritaria.


Parque del barrio.

Cancha del básquet.

Tal y como lo dije un principio, llenaría un sin número de cuartillas hablando de las bondades del Barrio Popular, estoy seguro, que estos primeros 80 años, no pasarán desapercibidos por todos los que de alguna forma hemos tenido el honor y la satisfacción de vivir tan especial vecindario. Feliz cumpleaños.




Recopilado por: Gastón Bermúdez V.


martes, 22 de octubre de 2024

2507.- ¡SIN JERARQUIA! CUCUTA ELIMINADO DEL TORNEO I-2024

Gustavo Contreras Sabogal (La Opinión)


¡Qué pena! ¡Qué vergüenza! Cúcuta Deportivo, sin falta de jerarquía, perdió 3-1 en su casa y sepultó sus opciones de clasificarse a la final del Torneo I-2024.

En medio de disturbios a las afueras del estadio General Santander, los motilones fueron remontados en una tarde para el olvido.

Jhonathan Agudelo abrió el marcador al minuto 31’, mientras que por la visita anotaron Carlos Bogotá (44’), Andrés López (90+3’) y Kevin Quejada (90+6’). Con este resultado, el fronterizo quedó con tres puntos de 12 posibles a falta de dos fechas.

Síntesis:

Cúcuta Deportivo: Eduar Esteban; Santiago Guzmán, Hernán Pertuz, Kevin Moreno, Mauricio Duarte; Cristian Díaz (Cristian Álvarez, 77’), Fabricio Moreno (Jefry Zapata, 58’), Lucas Ríos, Julián Angulo (Johan Montes, 58’); Valentín Robaldo (Styven Monsalve, 58’), Jhonathan Agudelo (William Parra, 81’).

Goles: Jhonathan Agudelo (31’)

DT: Braynner García.

Llaneros FC: Kevin Armesto; Federico Arbeláez (Carlos Bogotá, 24’), Miller Mosquera, Jan Angulo, Geovan Montes; Jhildrey Lasso, Marlon Sierra, Agustín Verdugo (Eider Restrepo, 46’); Duván Mosquera, Bryan Urueña, Kevin Quejada.

Gol: Carlos Bogotá (43’), Andrés López (90+3) y Kevin Quejada (90+8).

DT: Martín Cardetti.

“Que se vayan todos, que no quede ni uno solo”, cantaron cientos de seguidores del Cúcuta Deportivo, a las afueras del estadio General Santander en medio del partido ante Llaneros FC, que terminó en victoria 3-1 para el equipo de Villavicencio, en la cuarta fecha de los cuadrangulares semifinales.

En la cancha todo fue decepción y a las afueras un caos: intentos de invasión, piedras por doquier y conflicto entre seguidores y policías ‘decoraron’ la oscura jornada para el motilón. En la segunda parte, el compromiso tuvo que ser suspendido por cerca de cuatro minutos, tras los choques presentados a los alrededores.

¿El saldo de los desmanes? 12 personas detenidas entre menores de edad y adultos, y algunos vehículos afectados. ¿El saldo de lo deportivo? Sin chances de avanzar a la final.

¡Qué pobreza en la cancha!

Una decepción gigante para el equipo de Braynner García, quien terminó dirigiendo, tras la decisión de la dirigencia de cortar el proceso de Federico Barrionuevo.


Otra decepción: Cúcuta Deportivo derrotado por Quindío


Cúcuta Deportivo y Deportes Quindío retrataron, el mal presente de dos equipos histórico en la segunda división colombiana: ambos, con un juego pobrísimo, pelearon por no ser el último del cuadrangular B del Torneo I-2024.

La victoria, en un estadio Centenario de Armenia con pocos hinchas, fue para el local que se llevó los puntos al ganar 1-0 gracias a un gol del laborioso Alexis Serna al minuto 9. El triunfo le permitió al equipo de Rubén Darío Hernández llegar a cinco unidades de 15 posibles.

El fronterizo se quedó con tan solo tres, un penoso registro que – a falta de una fecha para finalizar esta instancia semifinal- lo deja con una efectividad del 20%.


“Amañados a la B. Jugadores sin sangre”, se pudo apreciar en un trapo colgado en la tribuna sur del estadio de la ciudad cafetera.

En Armenia, Cúcuta saltó al campo con una aparente actitud derrotista. El desánimo fue notable en el conjunto de Braynner García, que cierra un semestre para el olvido tras el rotundo fracaso en la instancia de los cuadrangulares.

El técnico cucuteño, que asumió este cargo tras la decisión de la dirigencia de despedir a Federico Barrionuevo, buscó variantes para refrescar su equipo con respecto a la derrota 3-1 con Llaneros en el General Santander.

En la defensa salieron los laterales Santiago Guzmán y Mauricio Duarte reemplazados por Bayron Suaza y Jhonatan González; el central Kevin Moreno fue al banco y su puesto fue ocupado por el argentino Benjamín Ortiz y en el mediocampo salieron los volantes Julián Angulo y Fabricio Moreno por Felipe Gómez y Donovan Forbes.

La decepción del hincha motilón se agigantó tan solo a los nueve minutos. Cristian Díaz, por izquierda, rifó un balón al enviarlo al centro, entregándolo al delantero rival Henry Castillo, quien asistió al capitán Alexis Serna para que este definiera con un remate al borde del área.

Del golpe, el motilón intentó levantarse, pero sin ninguna claridad. La carente asociación siguió dándose en el fronterizo, que no tuvo claridad en sus volantes que poco crearon en lo ofensivo.

El local si bien manejó el balón, no tuvo la profundidad necesaria para ampliar el marcador probando con dos disparos desde media distancia.

La visita, totalmente vestida de blanco, tuvo cuatro llegadas en la primera parte. Un remate lejano de Jhonathan Agudelo al 20’, un mano a mano del mismo atacante que fue salvado en la línea por parte del central Lopera, un disparo de Gómez que fue despejado por la defensa y una volea frontal de Ríos, bien atajada por Ramiro Sánchez.

Segundo tiempo soso

El aburrido primer tiempo se replicó en la segunda parte calcando un partido soso. El local tuvo dos manos a manos con Eduar Arizalas (68’) quien la envió fuera y Hugo Palacios (80’) al que Eduar Esteban le atajó con el pie.

El paraguayo Derlys Cabañas probó de lejos al 81’ y Andrés Álvarez al 90’ obligó a que Esteban se estirara.

La única clara del nortesantandereano fue una combinación entre Ríos, Agudelo y el venezolano Luis Zúñiga, quien, a la hora de definir, la envió a la tribuna.

Para finalizar, el argentino Benjamín Ortiz fue expulsado en tiempo de reposición. El argentino, que ha participado en 12 juegos, ha visto la roja en dos oportunidades.

Síntesis:

Cúcuta Deportivo: Eduar Esteban; Jhonatan González (Cristian Mosquera, 73’), Benjamín Ortiz, Hernán Pertuz, Bayron Suaza; Cristian Díaz (Luis Zúñiga, 59’), Felipe Gómez (Jonathan Tapias, 67’), Donovan Forbes (Julián Angulo, 46’), Lucas Ríos; Valentín Robaldo (Johan Montes, 73’), Jhonathan Agudelo.

DT: Braynner García.

Expulsado: Benjamín Ortiz (90+3’).

Deportes Quindío: Ramiro Sánchez; Quelmer Hurtado, Harold Balanta, Jonathan Lopera, Andrés Álvarez; Armando Preciado, Alexis Serna, Hugo Palacios, Eduar Arizalas (Derlys Cabañas, 78’), Henry Castillo (Jan Vallejo, 60’), Diego Díaz (Juan Ramírez, 60’).

Gol: Alexis Serna (9’).

DT: Rubén Darío Hernández.


Se acordó tarde: Cúcuta Deportivo superó a Unión Magdalena



“Jugadores sin alma, respeten los colores que para eso les pagan”, cantaron decenas de hinchas a las afueras del estadio General Santander, cuando se desarrollaba el duelo entre Cúcuta Deportivo y Unión Magdalena, la tarde del lunes 10 de junio.

El resultado fue a favor del rojinegro que se impuso 2-1 con goles de los argentinos Lucas Ríos (26’) y Valentín Robaldo (58’); por Unión anotó Dilan Ortiz (45+1). El triunfo solo le sirvió para sumar en la reclasificación puesto que ya estaba eliminado. De 18 puntos, los rojinegros sumaron únicamente 6 que lo dejaron en la penosa tercera posición.

Triunfo tardío

Como sucedió a lo largo del primer semestre, Cúcuta pasó apuros por su organización defensiva. Unión fue el equipo de la necesidad, puesto que con un empate se fuera clasificado a la final.

El cuadro de Santa Marta fue el que tomó el liderazgo para ir al frente y buscar superar al arquero Eduar Esteban, el jugador más destacado del semestre motilón. El cancerbero bumangués fue protagonista en la primera parte. De entrada, tuvo una doble atajada en los minutos 7 y 8, entre ellas un achique formidable al goleador del campeonato, Andrés Carreño.

Pese a que no se acercaba con peligro, Cúcuta abrió el marcador. Sobre el 26’, el gaucho Ríos se combinó muy bien con el cucuteño Styven Monsalve, quien después de eludir a un defensor, asistió al volante 10 para que la empujara delante del arquero Johan Wallens. Monsalve se encontraba en fuera de lugar, pero el juez de línea no vio la jugada.

La anotación fue un golpe para el Unión, que perdía el chance de ir a la final. Al 43’, en un contragolpe, Carreño desaprovechó la opción de poner el juego en tablas. Pero justamente en el tiempo de reposición, llegaría la paridad. Tiro libre lejano, centran, Hernán Pertuz y Kevin Moreno se chocaron, ganó un atacante de cabeza y por la misma vía, Dilan Ortiz anotó.

En la segunda parte, Unión salió con cautela tratando de prevenir otro gol del local, que optó por temas de seguridad jugar a puerta cerrada.

Cúcuta intentaba con remates lejanos de Ríos y Cristian ‘Jopito’ Álvarez, pero sin encontrar éxito. Sobre el 58’ llegó el gol que le dio la victoria al conjunto dirigido por Braynner García. Buena serie de pases entre el circuito de volantes, a borde de área Jonathan Tapias recibió, entregó a Valentin Robaldo, que, con su tradicional aguante de pívot, tuvo espacios para acomodarse y enviar un latigazo inatajable.

Los samarios se fueron al frente buscando desesperadamente el empate, al enterarse que Llaneros ganaba como local. El mismo afán le pasó factura al cuadro costeño. En dos oportunidades, Kevin Moreno despejó un balón de la línea, en otra Esteban atajó un taco muy vistoso y sobre el final Pertuz también sacó una pelota de gol.

Cúcuta tuvo un remate más con el capitán Jhonathan Agudelo, quien al parecer dejará la institución. Además de Agudelo, ingresaron William Parra, Julián Angulo y Cristian Mosquera.

La frustración fue evidente en el Magdalena que sobre final del juego varios de sus jugadores terminaron llorando la eliminación.

Hinchada volvió a reclamar

A las afueras del estadio, cientos de barristas reclamaron por el decepcionante semestre con canticos en contra de los jugadores. El cordón policial estuvo atento a cualquier novedad, recordando que en el último juego de local (derrota 3-1 ante Llaneros), se presentaron desordenes a los alrededores del ‘Coloso de Lleras’.

Síntesis:

Cúcuta Deportivo: Eduar Esteban; Jonathan González, Kevin Moreno, Hernán Pertuz, Mauricio Duarte; Felipe Gómez (William Parra, 64’), Jonathan Tapias; Cristian Álvarez (Julián Angulo, 90’), Lucas Ríos, Styven Monsalve (Cristian Mosquera, 90’); Valentín Robaldo (Jhonathan Agudelo, 79’).

Goles: Lucas Ríos (26’) y Valentín Robaldo (58’).

DT: Braynner García.

Unión Magdalena: Johan Wallens; Mera, Guillermo Tegüe, Jaime Giraldo, Dilan Ortiz (Juan Del Río, 90’); Juan Diego Giraldo (José Mercado, 67’) Agostino Spina; Janneson Sarmiento (Arneth González, 67’), Cristian Sención, Janeth Alemán; Andrés Carreño.

Gol: Dilan Ortiz (45+1).

DT: Álvaro Hernández.

Estadio: General Santander.


Comienza el segundo semestre 2024 con la obligación de ser campeón


¿Un nuevo intento? Cúcuta Deportivo inicia el 21 de julio, enfrentando a Atlético FC sobre las 3:00 p.m. en el estadio General Santander, su camino en el Torneo II-2024 en el que deberá ser campeón para luchar por el un ascenso en la Gran Final –instancia que reúne a los dos campeones semestrales para definir un cupo a primera división.

El comienzo de las competencias se da en medio de un ambiente de división entre el equipo y un sector de su hinchada luego del decepcionante cierre del Torneo I, en el que el Cúcuta falló en los cuadrangulares semifinales.

La desconfianza persiste y los seguidores del fronterizo mantienen su incredulidad de cara a los resultados que pueda ofrecer el equipo en este semestre tras una pretemporada en la que surgió la posibilidad de marcharse de la ciudad.


De cara a esta segunda campaña, la nómina cambió en el Cúcuta empezando por el cuerpo técnico: ahora el rol de timonel lo tiene el antioqueño Álvaro Hernández, quien reemplaza a Braynner García.

Del plantel de jugadores salieron David Agudelo (arquero), Santiago Guzmán (defensa), Benjamín Ortiz (defensa), Juan Camilo Moreno (defensa), William Parra (volante), Harlin Suárez (volante), Lucas Ríos (volante), Donovan Forbes (volante), Jefry Zapata (extremo), Luis Zuñiga (extremo), Fabricio Moreno (extremo), Walter Gómez (extremo), Jhonathan Agudelo (delantero), Johan Montes (delantero) y Germán Triana (delantero).


De altas, oficializadas, están Michell Ramos (delantero), Leonardo Escorcia (defensa), Sergio Avellaneda (arquero), Juan David Rueda (volante), Bladimir Angulo (volante), Alexander Borja (lateral) y Luis Guevara (volante). Entrenan con el equipo Ezequiel Gelves (extremo) y Agustín Cano (volante).

Michell Ramos, delantero que retornó tras vestir la rojinegra en 2021.

“Nos hemos enfocado en que el equipo esté bien, que esté fuerte mentalmente para sobrepasar obstáculos. Queremos proponer en la cancha, con un equipo que luche por el objetivo, que se ganador.

Los resultados son claves en todos los procesos, vamos paso a paso a hacer una buena campaña, a seguir apuntándole a la reclasificación, entrar en los ochos y pelear con todo por el ascenso”, señaló el técnico Hernández.

En la base de jugadores quedaron, como más relevantes, Eduar Esteban (arquero), Hernán Pertuz (defensa), Mauricio Duarte (lateral), Cristian Díaz (volante), Cristian Álvarez (volante), Cristian Mosquera (extremo), Juan Moreno (extremo), Julián Angulo (extremo) y Valentín Robaldo (delantero).

“Los jugadores que quedaron son porque se consideran que realmente quieren estar en el equipo, se quedan para sumar. Igual que los que llegan son muchachos jóvenes que de una u otra manera quieren seguir aprendiendo y tienen muchas ganas de salir adelante y triunfar en este equipo”, comentó el central Pertuz.

Michell Ramos, delantero que retornó tras vestir la rojinegra en 2021.

Cúcuta está obligado a ser campeón. En el semestre anterior ocupó la segunda posición en la fase del todos contra todos siendo cabeza de serie en el Grupo B que compartió con Unión Magdalena, Deportes Quindío y Llaneros.

En la instancia semifinal culminó en la tercera posición con seis puntos de 18 posibles. En la tabla de la reclasificación parcialmente es sexto con 38 puntos, 10 menos que el líder, Atlético Huila.

Este contexto obliga a que, para aspirar al ascenso, el motilón tiene que ser campeón del Torneo II. Esto lo llevaría a disputar la instancia de Gran Final –duelo de campeones- para definir un ascenso. El perdedor de esta fase se enfrentará con el mejor de la reclasificación.

Cristian 'Jopito' Álvarez, volante argentino.

“Hay un compromiso total. Sabemos lo que representa estar en el Cúcuta, queremos hacer las cosas bien. Hay un compromiso de ser sí o sí campeones, no hay de otra. Es una nueva ilusión, un nuevo semestre. De parte de nosotros cada partido es una final”, dijo Pertuz.

En esa misión por ser campeón, junto al Cúcuta lucharán una serie de equipos que se ‘armaron’ para aspirar al ascenso.

El campeón Llaneros mantuvo los referentes de su nómina e incluyó a los veteranos Andrés Felipe Cadavid (defensa) y Juan Fernando Caicedo (delantero), Maicol Medina (volante) y Arled Cadavid (arquero).

Real Cartagena siguió con un buen equipo liderado por Christian Marrugo (volante), Juan Camilo Angulo (lateral) y Teófilo Gutiérrez (delantero). Marchó el delantero Luis ‘Chino’ Sandoval.

Unión Magdalena fichó al entrenador Jorge Luis Pinto y conservó su nómina comandada por Andrés Felipe Correa (defensa). Mantuvieron al uruguayo Cristian Sención (volante) y de sus fichajes sobresalen Orles Aragón (delantero) y el regreso de Fabián Cantillo.


Atlético Huila, el elenco que más hizo puntos en el primer torneo, sumó a su plantilla al ecuatoriano Andy Velasco, proveniente del Independiente del Valle. El veterano Sebastián Hernández sigue como referente.

El primer rival al que recibirá el Cúcuta será Atlético FC de Cali, equipo que fue último en el semestre anterior con tan solo cinco puntos en 16 partidos y una diferencia de gol negativa de 29. Sus últimos siete partidos fueron derrotas.

El técnico brasilero Clodoaldo Paulino de Lima siguió con la dirección del equipo caleño, que tiene una nómina juvenil y en la que sobresale Jhonier Alomía, defensor de 2.05 metros de estatura. El experimentado Erick Montaño salió de este plantel.

“A Atlético, el semestre anterior, no le fue bien, pero siguen con un proceso, con jugadores que complican. Nosotros vamos con toda la expectativa”, dijo el estratega Hernández.

En el duelo del primer semestre, el motilón venció 1-0 en el Pascual Guerrero de Cali.


Después de un semestre en el que la Banda del Indio –barra popular del equipo- optara por no asistir al General Santander, por medio de un comunicado anunciaron su regreso a la tribuna sur.

En el Torneo I, durante el duelo entre Cúcuta Deportivo e Internacional, miembros de la barra ingresaron para protestar en contra del plantel lanzando billetes falsos y con duros mensajes.



Recopilado por: Gastón Bermúdez V.