Hno. José Martín
En breve diálogo sostenido con el hermano José Martín, director que fuera del colegio departamental del Sagrado Corazón de Jesús, hasta el 31 de diciembre de 1968. Pude darme cuenta exacta de cuánto bulle en su espíritu de educador sencillo, apacible y sincero. Fue la última tarde que estuvo en el colegio, el jueves 9 de enero de 1969, cuando en los amplios corredores del plantel me entrevisté con él.
Salía al día siguiente a dirigir un sexto de bachillerato en el Instituto de La Salle en Bogotá. Sabía que el hermano Martín partiría de la ciudad, mas no conocía la fecha de su viaje y por extraña coincidencia tuve la grata fortuna de entrevistarlo la víspera de su ida para la capital. Aquí nuestra conversación de amigos:
¿Hermano Martín en que época llegó Ud. a Cúcuta?
El 20 de abril de 1966, tomé la Dirección del plantel y en este cargo estuve hasta el 31 de diciembre pasado.
¿Cuál considera su obra de mayor satisfacción?
La labor educativa desarrollada durante mi tiempo de estadía al frente del colegio durante el lapso que le acabo de mencionar.
¿Y en lo material?
¡Ah!! En esto de igual manera tengo mi satisfacción naturalmente, vea usted. Ya está para terminarse el nuevo pabellón del colegio para nuevos claustros, que será en lo futuro la redención educativa, pues tendrá el plantel como albergar más de un millar de estudiantes, con el consecuente beneficio para todos los nortesantandereanos.
¿Estas obras que Ud. menciona, Hno. Martín quién las financió?
El gobierno departamental, con dos aportes de 160 mil pesos cada uno bajo la administración de la Secretaría de Obras Públicas Departamentales y un tercer auxilio que deja una obra por valor de 250 mil pesos, ya que para desarrollar la última inversión a que hago referencia, conté con la decidida colaboración de la Asociación de Padres de Familia del colegio y el aporte del gobierno municipal, facilitándonos una volqueta para el acarreo de materiales. Esto por intermedio del ejército y guardias de prisiones.
Sobre los cursos de capacitación de personal Armado:
¿Cómo se realizaron estos cursos, en relación al grupo empleado, la capacitación adquirida y el número de beneficiados?
Estos cursos de capacitación tuvieron un tiempo de desarrollo de 25 a 30 días intensivos hasta el máximo. Quedando capacitados los concurrentes en elemental y primero de bachillerato.
¿A cuánto asciende el número de asistentes?
Hicimos tres cursos con 30 o 35 alumnos que dan más o menos unos 100…
¿Qué erogación hizo el colegio para la realización de ellos?
Ninguna. Ni gastamos ni cobramos. Se pudo realizar gracias a la colaboración de los profesores del colegio que dictaron las clases sin costo alguno. De igual manera a la colaboración de los colegios: La Salle, Municipal, Salesianos y Nacional de Comercio. Mientras el hermano Martín nos refería su experiencia satisfactoria por lo logrado en lo referente a la capacitación de los Armados, se quedó de pronto mirando hacia mi agenda y rápidamente comentó: ¡Caramba! ¡Usted va a llenar más de una hoja!...
Y le respondí con admiración de amigos: bien quisiera Hermano, llenar no solamente una hoja, sino un periódico completo para testimoniar mi aprecio…
Mi última pregunta hermano José Martín, ¿qué recuerdo grato se lleva de Cúcuta?
Todos son gratos, inmensamente gratos, de modo especial la simpatía de los cucuteños, la gentileza del recibimiento, las demostraciones de afecto, pidiendo a mis superiores me dejaran aquí; pero sucede que, aunque la intención sea grande, no se podía ya que es norma dentro de la comunidad la realización de cambios cada 3 años.
Y recuerdo verdaderamente amargo si, la muerte del hermano Arturo sucedida el 8 de junio de 1968, seguida desafortunadamente por el sensible fallecimiento del hermano José acaecida el 1º de noviembre del mismo año.
Fueron conmovedoras las demostraciones de aprecio y afecto con motivo de las intempestivas desapariciones terrenales de nuestros compañeros. Todo esto me embriaga de total agradecimiento hacia todos y cada uno de los cucuteños y nortesantandereanos.
¿Volverá a Cúcuta?
Mi deseo es volver a Cúcuta, aunque no soy cucuteño de nacimiento, de corazón si lo soy, quiero a Cúcuta con todo lo profundo de mi corazón.
El hermano José Martín, nacido en Gachetá Cundinamarca; se bachilleró en el año 1943 en el Instituto de La Salle en Bogotá, tiene 24 años de servicio al magisterio y se apresta a celebrar sus bodas de plata en éste año.
Estudió durante cuatro años en Roma, filosofía y estudios religiosos, en el Ateneo Angélico de los padres Dominicos. En donde se doctoró en el año de 1.956. Para luego dirigir la casa de la congregación hasta 1.965.
Pasa después a ser Secretario Provincial de la Comunidad y en abril 20 de 1.966 llega a Cúcuta a dirigir el Colegio del Sagrado Corazón, cargo desempeñado hasta el 31 de diciembre del 68. Cuando es remplazado por el hermano Roque Casallas, nuevo rector de dicho colegio a quién desde luego presentamos nuestro saludo y deseos porque coseche muchos triunfos.
De modo entonces que, el hermano José Martín pasa a dirigir en el Instituto La Salle de Bogotá un sexto de Bachillerato. Este es el Curriculum Vitae del hermano José Martín.
Luego de este corto diálogo con el hermano José Martín, vino conmigo hasta la reja, sacó de su bolsillo una llave de color cobriza, abrió el viejo candado y luego de trasponer la reja de nuevo nos dijimos hasta luego… Hasta luego que volvamos a vernos Hermano Martín…. ¡
Y como un eco en los oídos me quedaba el recuerdo del bullicio estudiantil del colegio, cuando en tantas ocasiones busqué al hermano Martín para preguntarle sobre los adelantos y necesidades del plantel. ¿Y entre dientes me tragaba estas palabras “dicen que no son tristes las despedidas’’? ¡Dile a quién te lo dijo, que se despida...!
Recopilado por: Gastón Bermúdez V.
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