Hernando Vargas
Caicedo y otras fuentes
(En memoria de
Eleuterio García, constructor en metal, nacido en Cúcuta)
En 1992 se desmontó la estructura de hierro
de la Aduana de Cúcuta para utilizar el espacio como lugar de trabajo de los
vendedores ambulantes. Hoy solo se ven piezas arrumadas en espera de gestiones administrativas
que vuelvan a hacer visible y útil para la ciudad esta construcción levantada
en el siglo XIX, que entonces se convirtió en una novedad y que hoy es un
referente para estudiar la historia de la construcción industrial de esa época.
Esta vivienda que sirvió de albergue de las
mercancías que estaban en tránsito entre Colombia y Venezuela se demolió para
dar paso al edificio Oiti centro que ubicó a los vendedores informales.
Si se hace memoria el edificio de la Aduana
constituyó la estación de carga del tren de Cúcuta, y ahí su gran valor en la
historia arquitectónica no solo de la ciudad sino del Departamento.
Construcción
metálica mediante catálogos
Desde 1756, en Inglaterra se empezaron a
publicar catálogos relacionados con
elementos metálicos, en los que se elogiaba el hierro fundido como un material
económico. En 1768 se incluían chimeneas y bajantes; en 1818 se presentaban
rejas, y en 1823 y 1824 surgía la llamada “batalla de los estilos”, furor en
las fachadas comerciales. Aunque por entonces había mayor premura en registrar
los modelos que en divulgarlos, se vendían
aunque fueran costosos, lo que contribuyó a generalizar la fundición ornamental
a mediados del siglo XIX.
En 1784, Cort patentó el pudelado para hierro forjado (de
superior condición); en 1837, Sorel introdujo el término ‘galvanización’ y en
1844 se patentó la máquina para corrugado de lámina delgada. Con estos
recursos, ingleses y belgas exportaban viviendas. Los catálogos ingleses y
escoceses destacaban firmas de arquitectura como la de Edward T. Bellhouse
(Manchester) y la Eagle Foundry (Manchester), constructor de la Aduana de
Cúcuta.
Cúcuta, el
terremoto y su edificio de la Aduana
Ciudad fronteriza y mediterránea, se enfrentó
a la modernización mediante sucesivos impulsos. Ya en 1826 había tenido el
primer buque de vapor que transitaba por el río Zulia y que usó Bolívar.
Hasta Puerto Villamizar llegaban vapores
desde Maracaibo, después de las canoas, champanes y bongos. Se respiraba un
entusiasmo nacional por la exportación del café.
En 1864 se contrató la concesión y privilegio
para el camino de herradura, que se terminó en 1876. Días antes del sismo, se
había aprobado en la Junta Directiva del Camino que se emprendiera la obra como
banca del futuro ferrocarril.
La ciudad
ocupaba 52 manzanas de casas y tenía 12 mil habitantes cuando el sismo
del 18 de mayo de 1875 –con magnitud de 7,3– afectó violentamente el lugar, así
como a otros pueblos vecinos colombianos y venezolanos; incluso se sintió en
Bogotá y Caracas.
Después del desastre, con el ánimo de
reconstrucción resultante, para complementar el sistema de comunicación
terrestre en curso y como extremo de la vía terrestre y fluvial que la conecta
con el lago de Maracaibo, se propuso el edificio de la Aduana Nacional, que se
encargó por medio de Felipe Zapata en agosto de 1877 y se montó en 1879.
Zapata,
se desempeñó por entonces como Secretario
de Interior y Relaciones Exteriores. En 1874 fue nombrado Ministro
Plenipotenciario en Inglaterra y Francia para gestionar empréstitos y obtener
el envío de un ingeniero práctico en la construcción de ferrocarriles en
Suramérica. Con el terremoto de Cúcuta en 1875, y a raíz de sus tareas en
Inglaterra, presentó la oferta que obtuvo el contrato para traer de Manchester
y montar en Cúcuta el edificio de la Aduana Nacional, a partir de las
producciones del fabricante de edificios prefabricados Edward Taylor Bellhouse.
Un contrato pionero
En el Diario Oficial de 1 de septiembre de 1877 se registró el contrato
para la construcción de un edificio de hierro para la Aduana de Cúcuta.
CONTRATO para la
construcción de un edificio de hierro para la Aduana de Cúcuta. Luis Bernal,
secretario de Hacienda i Fomento, en nombre del Gobierno de los Estados Unidos
de Colombia, i Felipe Zapata:
Artículo 1º. Zapata o sus cesionarios se
encargan de hacer construir en Europa i erigir en la ciudad de San José de Cúcuta,
en el sitio que designe el Gobierno, un edificio de hierro para la Aduana,
sobre base de cal i canto i ladrillo, que encierre dentro de sus cuatro lados
un área o estensión superficial de diez mil pies cuadrados, sin incluir en esta
superficie la parte de terreno cubierta por los alares i goteras esteriores.
Dicho edificio se construirá de conformidad con el plano, secciones i
perspectiva adjuntos, i reunirá las siguientes condiciones:
1ª. Los materiales que se emplearán en la construcción del
edificio serán hierro forjado, hierro fundido i planchas
corrugadas del mejor hierro galvanizado. Todas las partes del edificio irán
sólidamente unidas por medio de tornillos i tuercas de hierro forjado i
remaches i washers de hierro galvanizado. Las piezas que en el plano número 2º
aparecen pintadas de verde serán de hierro fundido, las pintadas de azul de
hierro forjado, i el adorno i cornisa esterior que sirve para ocultar las
cabezas de las barras que forman la armazón del techo, i que en el plano
aparecen pintadas de naranjado, serán de buena madera barnizada.
2ª. Los techos de
las oficinas irán guarnecidos interiormente de un enmaderado para impedir la radiación
del calor; i tanto los techos de las oficinas como los de los almacenes tendrán
un ventilador continuo que será un segundo techo superpuesto de la forma i dimensiones
que aparecen en los dibujos adjuntos.
3ª. Las dimensiones
marcadas en los planos i secciones adjuntas están espresadas en pies ingleses,
siendo equivalente un pie a 3.0479,721 decímetros.
4ª. El edificio será
sustentado por columnas de hierro fundido de seis pulgadas de diámetro, i de un
espesor de metal suficiente para que cada columna pueda sostener en perfecta
seguridad un peso de 26 toneladas. Los espacios entre las columnas serán de diez
pies medidos de centro a centro de dichas columnas. Los capiteles i bases serán
semejantes a los dibujos. Las bases irán aseguradas a los cimientos, cada una
con cuatro gruesos tornillos de hierro forjado.
5ª. Las columnas
serán aseguradas entre sí por una armazón de hierro forjado, formada por barras
angulares cortadas según las dimensiones requeridas.
6ª. En la parte
superior de los espacios entre las columnas habrá una reja de tres pies de
altura formada por barrotes de hierro forjado de ¾ de pulgada de diámetro i
mediando entre ellos espacios de seis pulgadas. Esta reja recorrerá toda la
parte esterior del edificio, según se muestra en los planos.
7ª. Los costados o
paredes internas i esternas del edificio serán cubiertas con planchas
corrugadas del mejor hierro galvanizado, número 18, B.W.G. Estas planchas irán
firmemente aseguradas entre sí i fijadas a las armazones de hierro.
8ª. Los techos serán
construidos de la forma representada en la figura 2ª. Plano número 2. Las vigas
principales del techo (main-rafters) serán barras de hierro formadas de la
sección T, e irán asentadas en sus columnas sobre sillas o sustentáculos de
hierro fundido i aseguradas con fuertes tornillos i tuercas de hierro forjado.
Las vigas (purlins) que recorren transversalmente los declives de los techos serán
de hierro angular, e irán asentadas sobre las vigas principales en sillas de
hierro forjado, remachadas a éstas i aseguradas con tornillos i tuercas.
9ª. Los alares del
edificio se proyectarán sobre la parte esterior dos pies seis pulgadas, i
formarán en el interior un corredor de cuatro pies de anchura. Los alares irán sostenidos
por canes (brackets) de hierro fundido ornamentados de la manera que aparece en
los dibujos.
10ª. Todos los alares
interiores i esteriores del edificio llevarán canales de hierro galvanizado
para recoger las aguas lluvias, las cuales serán conducidas al suelo por columnas
de hierro fundido.
11ª. Los techos serán
cubiertos con planchas corrugadas de hierro galvanizado número 24 B.W.G.
12ª. Los caballetes
de los techos llevarán una cresta ornamentada de hierro fundido, de la forma
como aparece en la perspectiva del edificio.
13ª. El frente i la
espalda del edificio serán cerrados por verjas de hierro de la altura de los
alares, ornamentadas de la manera que indican los dibujos. Dichas verjas
tendrán puertas enrejadas de 12 pies de anchura, i el arco superior de cada
puerta irá coronado de tres grandes faroles.
14ª. Cada uno de los
almacenes de depósito llevará dos puertas de hierro que correrán lateralmente
en ranuras i sobre rodillos de hierro. La anchura de cada puerta será de diez
pies para permitir la entrada de carros a los almacenes.
15ª. Las oficinas i
las piezas para el resguardo llevarán cada una cuatro ventanas, dos interiores
i dos esteriores. Las ocho ventanas que dan sobre la parte esterior i las que
aparecen marcadas en el plano, pero no en la perspectiva del edificio, serán
resguardadas por barrotes de hierro de ¾ de pulgada de diámetro. Todas las
ventanas irán cubiertas interiormente por una gaza de alambre.
16ª. Las oficinas i
las piezas para el resguardo tendrán puertas jiratorias, con marcos de hierro
forjado i cuarterones o entrepaños de hierro corrugado i galvanizado.
17ª. Las puertas de
las verjas i las de los almacenes tendrán cerrojos i llaves duplicadas; i las
de las oficinas i piezas para el resguardo tendrían cerraduras ordinarias con
llaves duplicadas.
18ª. Todas las partes
del edificio que sean de hierro galvanizado serán cubiertas de una pintura o
capa de óxido metálico para preservar el hierro de la humedad.
Artículo 2. Zapata y sus cesionarios deberán proveer además para el servicio de la
Aduana las siguientes máquinas i útiles:
1ª. Cuatro cabrías o
grúas fijas, dos para cada almacén, para facilitar la carga, descarga i almacenaje
de los bultos pesados. Cada cabría estará provista de cadenas i ganchos de
hierro i deberá tener la fuerza suficiente para levantar el peso de media
tonelada.
2ª. Una balanza de
plataforma que será colocada al nivel del suelo en la entrada de la Aduana, de
manera que puedan pesarse carros cargados hasta el peso de tres toneladas. La
plataforma de la balanza tendrá 6 pies de largo por 4 ½ de ancho, i
3ª. Cuatro
carretillas de almacén para mover fardos voluminosos i pesados.
En fe de lo cual
firmamos dos ejemplares de un tenor en Bogotá a 25 de agosto de 1877
LUIS BERNAL –
FELIPE ZAPATA Poder Ejecutivo nacional, Bogotá agosto 25 de 1877
Aprobado
El Presidente de
la República
AQUILEO PARRA
El Secretario de
Hacienda i Fomento
Luis Bernal
Acto seguido, en el Diario Oficial de 1 de setiembre de 1877 se
relaciona el Informe sobre la Aduana de Cúcuta en el que Salvador Camacho
Roldán reporta al Secretario de Hacienda i Fomento sobre su visita a la Aduana
de Cúcuta. Se destaca que, aparte de estadísticas sobre el comercio del lugar,
Camacho Roldán enfatice en “la conveniencia de contratarlo en el extranjero, de
construcción adecuada para los terremotos i materiales a prueba de fuego, a lo
menos en parte, porque el peligro de los incendios me parece que va a ser grave
en los nuevos de bareque con que se está levantando la nueva población. La
Aduana podría así servir de modelo para la reconstrucción de la ciudad”.
La planta de la Antigua Aduana tenía un patio
central con dos pabellones laterales y cuatro módulos; su área era de 1.240 m2
y tenía además dos accesos, con cúpula octogonal. La altura de los pabellones
era de 3,65 m a 6,6 m en la cumbrera. Las columnas metálicas cilíndricas tenían
capiteles con hojas de acanto.
Juan Nepomuceno González Vásquez, destacado
ingeniero colombiano del siglo XIX, inició en julio de 1877 los estudios y
trazados que permitieron comenzar en 1879 los trabajos del ferrocarril de Cúcuta
a Zulia.
Había así un edificio de la Aduana sin tren
hasta que, después de muchas dificultades, se dio al servicio en 1887.
En ese año se contrataron rutas urbanas y
suburbanas. Para reconstruir la ciudad después del terremoto, el ingeniero
Francisco de Paula
Andrade trazó el nuevo diseño bajo estricta cuadrícula; propuso una ciudad más
amplia y con largas hileras de árboles que hoy se agradecen.
Una nueva plaza de mercado metálica fabricada en
Inglaterra se construyó en la década de 1890 y prestó servicio hasta su
incendio en 1949.
En 1890 se había montado una verja de hierro en el Parque
Santander, importada de Alemania, y la misma Estación Cúcuta (1893) tenía
cubierta metálica.
Para el Palacio de la Gobernación, diseñado en concurso
de 1912, se recibieron cúpula y techos metálicos despachados desde Nueva York
(1915).
Finalmente, el edificio de la Aduana fue donado en 1943
al municipio de Cúcuta y desarmado en 1992 por decisión de la Alcaldía de esa
capital, para darle paso a la construcción de un centro comercial para los
vendedores informales locales.
Como resultado, fue inventariado y embodegado en 1994.
Aunque la Ley 153 de 1959 declaró monumentos nacionales las estaciones ferroviarias
existentes en el territorio nacional, se arguyó para su desmonte que la
estructura había sido destinada originalmente a Calcuta (India) pero despachada
por equivocación a Cúcuta, desconociendo la documentación sobre su historia.
El inventario de 1995 incluye láminas laterales, de
techo, ángulos, ventanas, cúpula, caballetes, puertas, rejas y poleas de
portones.
En 1997, un comité técnico conceptuó que el edificio
tenía valores patrimoniales indiscutibles y recomendó gestionar la protección
legal al municipio y hacer una solicitud al Gobierno Nacional.
Ficha de inventario - 1999
Ubicación Geográfica: Sur América,
Colombia, Norte de Santander, Cúcuta.
Dirección original: Avenida 7 entre
calles 10 y 11. Actualmente está desmontada y embodegada por las Empresas
Municipales de Cúcuta, en el antiguo mercado de El Contento.
DOCUMENTOS DE ARCHIVO
Reseña histórica municipal:
Estructura en hierro fundido, procedente de Inglaterra en 1.879. Allí funcionó
la Aduana Nacional y fue parte del Ferrocarril de Cúcuta. Se desarmó y guardó
su estructura debidamente inventariada en cada una de sus piezas, siendo
depositada inicialmente en las instalaciones de Cenabastos en el año de 1.992,
para dar paso a la construcción del edificio "Centro Comercial El
Oití", destinado para la reubicación de vendedores ambulantes que invadían
el espacio público de la ciudad.
OTROS DATOS SECUNDARIOS
Género: Administrativo
Uso: Mercado, vendedores
ambulantes, edificio Municipal.
Original: Administrativo, bodegas y
depósitos Aduana de Cúcuta.
Actual: Desarmada.
Propietario: Municipio de Cúcuta
Status: Pública.
Estado: Se encuentra desarmada y
embodegada. El inventario de cada una de las piezas reposa en los archivos de
la E.I.S. Se encuentra en mal estado. CORPATRIMONIO solicitó su declaratoria
como "Monumento Nacional"
siéndole negado hasta que no se arme o ubique en un sitio o terreno específico,
igualmente se hicieron grandes esfuerzos porque fuera nuevamente ubicada en las
instalaciones del "Centro Ferial de Cúcuta" sin embargo se le dio
prioridad a un galpón metálico de una procesadora de caña de azucar.
Fecha de realización de la ficha:
Marzo de 1.999
Realizada por: Corpatrimonio
Fotógrafo: Sergio Sánchez Grillo
Recopilado
por: Gastón Bermúdez V.
Los saludo cordialmente con el fin de saber si existe alguna información sobre el estado de las partes de la aduana y de su posible reconstrucción, muchas gracias.
ResponderEliminarcomo puedo conocer los planos de la aduana o donde encontrarlos
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