Los recuerdos de su natal Chitagá nunca la abandonan.
Aunque han pasado muchos años desde que tomó vuelo rumbo a Bogotá, Fidelia Villamizar Bautista tiene claro que lo suyo es Norte Santander.
No niega esta abogada chitaguense, que ha sido afortunada en el desarrollo de su actividad laboral, tanto en los cargos por elección popular, como a los que llegó por nombramiento.
Antes de contarnos En qué anda, recuerda que los estudios de primaria y secundaria los hizo en Pamplona con las hermanas Terciarias y La Presentación, y su título profesional de abogada se lo concedió la Universidad Externado de Colombia.
Su primera incursión en la actividad política la hace muy bien acompañada. Porque nada más y nada menos, para el periodo 1966-1968, participa en las listas que encabeza al Congreso de la República por Norte de Santander, el ingeniero civil Virgilio Barco Vargas. Y en la lista a la Cámara de Representantes, Fidelia Villamizar sale elegida junto a León Colmenares, Eduardo Gaitán Durán y Marcos García Carrillo.
Cumplido su papel en el Congreso, a comienzos de 1970 la nombran subgerente de cesantías del Fondo Nacional del Ahorro, en Bogotá.
Y a partir de ese cargo sigue una cadena de cargos en Bogotá.
De 1972 a 1974, se desempeña como jefe del Departamento Jurídico y Secretaria general, de la Aeronáutica Civil. En la época en que el director de la Aeronáutica era Jorge Barco Vargas.
Muy satisfecha recuerda que cuando comenzó el gobierno del presidente Alfonso López Michelsen, para destacar el trabajo de la mujer colombiana nombra ocho mujeres gobernadoras, y en el grupo entra Norte de Santander con Fidelia Villamizar Bautista.
Pero ella solo está dirigiendo los destinos de su departamento un año, (1974- 1975) porque quedó embarazada, y cuando ya tenía ocho meses de gestación se retiró, porque se le dificultaba cumplir con ciertas actividades. Decide renunciar, y regresa a Bogotá donde nace su único hijo Jesús Alfonso.
Cuando su hijo ya tiene un año, regresa a su actividad pública. Bernardo Gaitán Mahecha, alcalde de Bogotá la nombra gerente general de la Empresa Distrital de Servicios Públicos EDIS. Señala que era una empresa muy grande en ese momento, con más de cuatro mil empleados, ahí está casi dos años, del 76 al 78 y renuncia porque el destino le depara otra labor fuera de Colombia.
Ahora le llega el momento de cumplir en otro escenario, y es en la vida diplomática. A su esposo Jesús Pérez González- Rubio, lo nombran cónsul de Colombia en Boston. La familia viaja a una de las ciudades con más historia de Estados Unidos, en donde permanecen hasta finales de 1979,
Terminado este grato trabajo regresan a Bogotá, le dedica casi tres años de tiempo completo a su hijo Jesús Alfonso.
En 1982, ya en el gobierno de Belisario Betancur, siendo ministro de Justicia Bernardo Gaitán Mahecha, la llama a acompañarlo en el cargo de Secretaria General del Ministerio de Justicia, quien está hasta finales de 1983. Cuando cambian de ministro llega Rodrigo Lara Bonilla.
Para ella el nuevo Ministro no es desconocido, porque había sido compañero de Universidad en el Externado de Colombia, aclara que no en el mismo curso, porque él estaba como dos cursos adelante.
De Lara Bonilla tiene un muy buen recuerdo, lo califica una magnifica persona y un muy buen jefe.
Como una muy buena liberal, Fidelia Villamizar siempre ha estado fiel a su partido, y más en esta ocasión cuando el candidato a la Presidencia de la República, es su copartidario, paisano y amigo, Virgilio Barco Vargas. Con la camiseta de su partido bien puesta, y el “dale rojo dale” trabaja de tiempo completo durante toda la campaña, hasta que Colombia elige como presidente a Virgilio Barco para el periodo 1986-1990.
Ya en el gobierno, Barco la nombra Superintendente de Industria y Comercio. Cargo que cumple hasta que llegó César Gaviria a la Presidencia de la República.
Hasta el 2002 no se había retirado del todo de la actividad política, y es por eso que cuando Álvaro Uribe Vélez hizo público su aspiración a la Presidencia, ella se vinculó a esa primera campaña.
Actualmente acompaña la candidatura a la Alcaldía de Bogotá de David Luna, primero porque es del Partido Liberal, y además porque desde pequeño es muy amigo de su hijo Jesús Alfonso. Para el Senado siempre le ayuda al cucuteño Juan Fernando Cristo.
Confiesa que hace como siete años que no viene a su tierra, pero eso no impide que mantenga relación con sus paisanos.
Dice Fidelia Villamizar que no hace mucho tiempo había una organización de nortesantandereanos, a la que siempre que la llamaron para asistir a las reuniones, pero infortunadamente no han vuelto a convocarlos.
Nunca se ha quitado la camiseta de su tierra, “quiero mucho a mi departamento y a mí gente”.
A Chitagá reconoce que hace mucho tiempo que no la visita, sin embargo recuerda a mucho a sus paisanos. Anota que cuando ha estado en los diferentes cargos del ámbito nacional, siempre ha tratado de llevar gente del departamento especialmente de la provincia de Pamplona.
De su época en la Gobernación de Norte de Santander, recuerda que impulsó dos proyectos que consideraba que eran muy importantes para el departamento en esa época, la roca fosfórica de Sardinata y el ingenio azucarero del El Zulia. Pero se presentaron muchos inconvenientes y no se pudieron desarrollar.
Después de separarse de su esposo hace más de seis años, y teniendo en cuenta que su hijo Jesús Alfonso se casó hace poco tiempo, Fidelia Villamizar está dedicada a su oficina de abogados especializados en propiedad intelectual, marcas, lemas comerciales, nombres , patentes y derechos de autor.
No descarta que en un tiempo no muy lejano esté visitando estas tierras que le son tan queridas.
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