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Antonio
Soler Lozano.
ANTONIO SOLER LOZANO
El empresario y antiguo dirigente cívico y liberal
cucuteño, Antonio Soler Lozano falleció el 6 de marzo de 2014 en la ciudad de
Medellín donde residía desde hace unas dos décadas, a la edad de 91 años.
Soler, que nació en Cúcuta el 22 de abril de 1922 casado con Alicia Estévez con
quien tuvo 6 hijos Amparo, Alberto, Jesús Eduardo, Leonardo y Sandra.
Fue Tesorero municipal en la década del 70 en la
administración de Álvaro Villamizar Suárez.
Entusiasta dirigente liberal por esas décadas militó
siempre en el movimiento que dirigía León Colmenares Baptista, siendo por
varios años el tesorero del partido.
Empresario del sector de materiales de la construcción
fue también miembro del Club Deportista, tal vez el primero organizado en la
región en la década del 50 y posteriormente cuando se disolvió este, participó
en la fundación del Club de Cazadores, del cual también hizo parte de su junta
directiva.
Fue presidente del Fondo Ganadero en los años
80, lideró diversas iniciativas para la región.
Cuenta Luis Fernando Carrillo que Antonio Soler fue,
¨ante todo, un hombre cívico, especie hoy en extinción. Suplantada hoy por
gentes que tomaron a Cúcuta por asalto, y derribaron la decencia y el
progreso.
En las empresas que propendieran por Cúcuta Antonio
era llamado entre los principales. Era lo merecido para un varón de virtudes
ciudadanas. Adornadas con la honradez y la sencillez que lo caracterizaron.
Presto a sus amigos en su trabajo, en la calle, en
los directorios, que oían su acertado mensaje, en los cargos públicos, que
desempeñó con honradez, consustancial a su ser en el ayer de sus ancestros.
Carrillo en los años de su empiece de su adolescencia trabajó en la oficina
del doctor Miguel Alvarado García, situada en los altos del banco Colombia, y
cada quince días tenía que recoger las firmas, de los que debían asistir a
las reuniones de reglamento, del directorio liberal departamental.
La fotografía de hoy corresponde a la reunión de un
grupo de dirigentes políticos perteneciente a la Junta Directiva del MRL de
1976, cuando gestionaban acercamientos con el Partido Liberal después de la
renuncia de Alfonso López Michelsen. De izquierda a derecha: Alicia Estévez,
León Colmenares Baptista, senador del partido liberal, Carlos Ardila Ordóñez,
director del MRL, Juan José Yáñez R, Antonio Soler Lozano, presidente del
Directorio Liberal y Pablo Emilio Ramírez Calderón.
Empezaba con don Anastasio Ramírez en la plaza de
mercado. Se limpiaba las manos con el delantal, la leía y firmaba. Después
pasaba al consultorio del doctor Antonio Vicente Ramírez Calderón, avenida
octava entre calles diez y once. Firmaba y enviaba saludos al doctor
Alvarado. Después volteaba por la once hacia la séptima, y ahí, diagonal a la
ferretería El Cóndor, estaba don Antonio Soler Lozano. Tomaba nota de la
convocatoria, dejaba los quehaceres de venta de pintura, y firmaba con su
letra de comerciante diestro.
Estos entre los que se recuerdan, pero lo que no se
olvida son las maneras amables de Soler, que lo caracterizarían hasta el fin
de sus días. Su manera de ser, franca, descomplicada, servicial, leal a sus
ideas, y amistades.
Dejó trascurrir la vida en esta bien amada San José
de Cúcuta. Hace algunos años se fue a vivir a Medellín. Pero sin
olvidar, al pueblo que lo aquerenció, a sus amigos. Desde acá forjó una
manera de hacer política. Basada en la honradez, en la lealtad a los
principios, y en el espíritu de servicio¨.
GIOVANNI MARTIN VISENTIN
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Giovanni
Martin Visentín
Hijo de Beniamino Martín y Rosa Visentín, el menor de
siete hermanos. Nació en Veneto, provincia de Treviso, Italia, el 26 de junio
de 1922.
A los 24 años emprendió un largo viaje a su primer
destino que era Venezuela, pero lo cautivó la tierra nortesantandereana por el
encanto de su gente.
Se radicó en Cúcuta en 1953. Empezó a trabajar en un
restaurante hasta que aprendió el idioma, después como promotor de ventas en la
empresa Tito Abbo, donde escaló hasta ser miembro de la junta directiva de la
firma.
Dos años después, en 1955, se casó con Lucy Abrahim,
unión de la que nacieron Rosita, Eleonora y Gabriela. Aunque en Cúcuta conoció
a la mujer que lo enamoró siempre extrañó a la Italia que lo vio nacer.
En
alguna reunión informal en el Club Tennis de la ciudad en ella podemos apreciar
en cordial tertulia de izquierda a derecha a: León Londoño Tamayo, con su
infaltable “habano” entre los dedos, Francisco Pérez Aranguren, Jorge Cristo
Sahium, Jaime Buenahora Febres, Jaime Unda Baena y Giovanni Martin.
Con mucha nostalgia recordaba su época de antaño y se
sentía orgulloso de haber pertenecido al frente austriaco del ejército italiano
en la Segunda Guerra Mundial.
Fue Cónsul de Italia en el año 1978, cargo que
desempeñó hasta el 2000. Miembro reconocido de Fenalco y fundador de la empresa
Martín & Cía, almacén de electrodomésticos y enseres para el hogar.
Estuvo vinculado a las actividades de la Iglesia, participó activamente del
Movimiento de Unidad de Acción Nortesantandereana (Muan), donde organizó la
primera feria industrial de la frontera en 1968 y ayudó a fundar la Zona
Franca.
El Club Rotario lo condecoró como socio antiguo y honorario.
PEDRO NEL CANAL
El 25 de septiembre de
2015 en la Clínica Santa Ana, a los 94 años, falleció don Pedro Nel Canal
Ramírez, último integrante de una generación tradicional de cucuteños que
estuvieron dedicados al comercio, la agroindustria y ganadería, las artes
gráficas y el derecho.
Pedro Nel, nacido en
Chinácota en 1921, se radicó con su hermano Mario, fallecido hace algunos años
en sus propiedades en el corregimiento de La Garita, siendo ellos los
colonizadores de todo el desarrollo que ha tenido el sector conocido como la
“Recta de Corozal”, donde hoy en día funcionan diversos negocios de esa
tradicional familia.
Contrajo matrimonio en
1957 con Nola Ramírez de cuya unión le sobreviven sus hijos María del
Pilar, Carlos, Susana, Nola, Carmenza, Amparo y Mario.
Fue un entusiasta
dirigente del fútbol a través del Cúcuta Deportivo en sus años de inicio en la
década del 50 y comienzos de los 60. Junto con un italiano, don Felicce
Torre, contrataron las estrellas uruguayas que vinieron a integrar el equipo
Motilón, como Tejera, Gambetta, Toja, Zapiraín y Sacco.
Su familia acordó donar un terreno para la
construcción de un polideportivo en el sector de La Garita idea que ha sido
apropiada por la alcaldía del municipio de Los Patios con la colaboración de aportes
privados de la familia Canal Ramírez.
ENRIQUE VARGAS RAMIREZ
El
parlamentario nortesantandereano, primo de Virgilio Barco Vargas, murió en
Bogotá a los 89 años.
El exministro y exembajador, Enrique Vargas Ramírez falleció al
mediodía del 5 de noviembre de 2015, así lo informaron familiares y allegados.
Este ingeniero nortesantandereano, nacido en el año de 1926,
también fue presidente de la Flota Mercante Grancolombiana y vicerrector de la
Universidad Nacional de Colombia.
Vargas fue ministro de Obras Públicas y Transporte
durante el mandato del presidente Julio César Turbay Ayala (nombrado por
decreto en agosto de 1978), reconocido como el ministro estrella durante
su mandato, y fue embajador de Colombia en Venezuela en el periodo de Álvaro
Uribe Vélez, y a pesar de los inconvenientes presentados entre ambos gobiernos,
el presidente Hugo Chávez lo distinguía entre todos los embajadores en los
actos oficiales, y su presencia hacía que el autoritario líder moderara sus
opiniones sobre Colombia, por eso él se impuso la obligación de asistir a todas
los eventos presidenciales.
Fue alcalde de Cúcuta cuando para ese cargo eran
llamados los mejores ciudadanos; jefe liberal del departamento, partido al que
abanderó con singular brillantez en el Congreso Nacional.
Pisó la antesala de la candidatura presidencial por el
Partido Liberal cuando los delegados al congreso de Sochagota, reunido poco
después de dejar su cartera ministerial, lo proclamaron en una clamorosa
proposición. A esa dignidad renunció por modestia.
Fue presidente por varios años de la Comisión
Binacional Colombo - Venezolana.
De su pluma son “Muerte en la Candelaria”, “Destino del
Unicornio” y “Memoria de la Gran Convención”, y dejó terminada, pero sin
publicar, la obra histórica “La Guerra”.
Era un catador ilustrado de poesía y de los
licores más exquisitos. Conocía tanto de etiqueta como de novela, y se
complacía en compartir la buena mesa y su conocimiento de la historia. Su
muerte deja un gran vacío, pero el recuerdo de su vida permanecerá como un
legado edificante.
Esta fotografía fue
tomada el 2 de marzo de 1981 con motivo de la visita del entonces Ministro de
Obras Públicas para la inauguración de la sede de la Superintendencia Bancaria
en esta ciudad. En ella Eustorgio Colmenares Baptista, Gustavo Vasco
Superintendente Nacional, Carlos Rangel entonces presidente de Fenalco
seccional y al entonces Ministro, Enrique Vargas Ramírez.
EL nortesantandereano hijo de Manuel José Vargas Durán y Margarita
Ramírez Colmenares, fue condecorado en el 2012, por el alcalde de Cúcuta
Donamaris Ramírez, con la medalla Juana Rangel de Cuéllar en categoría especial
por considerarse un referente obligado de la historia de los cucuteños.
En Norte de Santander donó su colección literaria con más 6.500
volúmenes a la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero y un archivo Fotográfico
de 800 piezas aproximadamente, que pueden ser consultadas por toda clase de
usuarios en la Sala de Colección General.
Enrique Vargas Ramírez hizo parte de una estirpe regional con relevante
protagonismo en la política, en la cultura y el emprendimiento
empresarial. Fue un intelectual consciente de la importancia del
conocimiento y un político con ideas democráticas. Orientó, gobernó,
escribió y vivió con las dinámicas de su tiempo y de su talante
cultural. Sus desempeños en lo público fueron de utilidad para el país.
Sin duda, deja un legado que la región debe incorporar al repertorio de
los recursos que hacen parte de su patrimonio. (Cicerón)
EDUARDO GAITAN DURAN
Eduardo
Gaitán Durán
El ingeniero nortesantandereano Eduardo Gaitán Durán falleció el 1º de abril de
2014 en la ciudad de Cary, del estado de Carolina del Norte (Estados Unidos) a
la edad de 86 años, según confirmaron sus familiares en Colombia.
Gaitán había nacido en Cúcuta en octubre de 1927. Fueron sus padres el
ingeniero civil Emilio Gaitán Martín y la señora Delina Durán Durán. Y es nieto del General Justo L. Duran.
Su único hermano fue el ya fallecido poeta Jorge
Gaitán Durán. Cursó estudios de ingeniería civil en la Universidad de
Mississippi y allí mismo recibió su título profesional. Posteriormente hizo
cursos de especialización en la Universidad de la Florida.
En el sector empresarial estuvo vinculado a la industria de la arcilla en Norte
de Santander.
En la política fue activo dirigente del Partido
Liberal y en dos períodos se dio su elección a la Cámara de Representantes.
En el Gobierno de Alfonso López Michelsen ocupó el
Ministerio de Minas y desde allí impulsó el proyecto de Termotasajero, en
el muncipio de San Cayetano, para la generación de energía eléctrica
mediante el aprovechamiento del carbón.
En el Club del
Comercio de Pamplona a finales de la década de los 50, en un evento social
elegante y en la cual apreciamos a los integrantes de una de las mesas del
festejo posando animadamente para la foto. De izquierda a derecha: Yolanda
Faccini de Echeverry, Armando Echeverry G., Luis Parra Bolívar, Ligia
Echeverría de Parra, Doris de Gaitán, Eduardo Gaitán Durán, Alicia Baraibar de
Cote y Eduardo Cote Lamus.
También fue director del Sena y presidente de Fenalco
y fue Embajador de Colombia en Washington.
Del matrimonio de Gaitán Durán con la estadounidense Doris Mills tuvieron
dos hijas: Delina y Lisa, quienes viven en Bogotá y Estados Unidos.
El ex ministro Enrique Vargas Ramírez recuerda a su primo Eduardo Gaitán como
“un ser excepcional”, por las calidades humanas que le atribuye. Destaca su
conocimiento de la literatura inglesa y de la historia de Estados Unidos. Al
mismo tiempo elogia su “nobleza en las relaciones familiares”.
Eduardo Gaitán Durán fue autor del libro “Una mirada al Frente Nacional”.
PEDRO ENTRENA PARRA
En la foto
recordamos en alguna reunión gremial entre otros de izquierda a derecha a:
Pedro Sayago Rojas, Orlando Obregón, Manuel Correal, ¨Pedrucho¨ como le decían, Rubén Eslava y Antonio Gómez Plata. Varios de la vieja
guardia de la directiva de la Cámara de Comercio.
Pedro Entrena Parra, quien durante 40 años se
desempeñó como directivo de la Cámara de Comercio de Cúcuta, falleció el 23 de
junio de 2011. El ingeniero civil fue presidente del organismo cameral en los
períodos 1977-1979 y 1983-1985.
Nacido en Cúcuta, en 1934, se destacó como líder cívico de la región. Se
casó con Blanca Mutis, unión de la que nacieron Blanca Teresa, Gabriel, Álvaro,
Elsi, Liliana y Mauricio.
Su vida transcurrió en el ejerció continuo por el crecimiento económico
fronterizo. En 1969 fundó el Movimiento de Acción Nortesantandereana , Muan,
con José Neira Rey, Julio Moré, Antonio Guerrero Gallardo y Antonio María
Patiño, entre otros. Allí analizaron y plantearon las necesidades de la región
generando propuestas para incorporar a Norte de Santander en el Plan Nacional
de Desarrollo.
Pedro Entrena Parra, con la participación de la Cámara de Comercio de
Cúcuta y otros miembros del movimiento, impulsó la Ley 22 de 1971, mediante la
cual se honra la memoria del general Francisco de Paula Santander y se
ordena el traslado de sus restos, entre otras disposiciones.
Siempre atento a la actividad de la entidad y al impulso de acciones para esta
zona, gestionó la expedición del Decreto 584 de 1972, por el cual se establece
la Zona Franca Industrial y Comercial de Cúcuta, y de la Ley 43 de 1973,
por la cual la nación se asoció al Primer Centenario de la reconstrucción de
Cúcuta.
En 1983, como directivo y presidente de la Cámara de
Comercio participó en la instalación de una comisión extraordinaria para
gestionar ante el Gobierno central una política de fronteras mediante una
estrategia de incentivos y acciones inmediatas para reactivar la economía ante
la devaluación del bolívar.
Se le recuerda por la lucha que libró en la Confederación de Cámaras de
Comercio (Confecámaras) para la creación del Comité Nacional de Fronteras, del
que fue presidente por más de 20 años, en representación de la Cámara de
Comercio de Cúcuta.
Por medio de la Junta Monetaria logró un cupo especial de crédito hasta por
$2.000 millones para financiar las empresas del sector comercial que se
vieron afectadas por la crisis económica de 1983.
Promovió ante el Gobierno Nacional, con el respaldo de la Cámara de Comercio de
Cúcuta y Confecámaras, el convenio binacional entre el Banco de la República y
el Banco Central de Venezuela para establecer un precio real de negociación de
las respectivas monedas para mejorar la actividad comercial.
En ese mismo año, como presidente de la Cámara de Comercio de Cúcuta
y con el apoyo de José Neira Rey y del entonces senador Félix Salcedo
Baldión, logró que el Gobierno expidiera la Ley 10 del 17 de junio de 1983, que
revistió al presidente de la República, Belisario Bentacur, de facultades
extraordinarias para diseñar una política de fronteras.
Producto de esa misión liderada por Entrena Parra, el gobierno colombiano
expidió el Decreto 3448 de 1983 o Estatuto Especial para las Zonas
Fronterizas.
En
esta foto tomada en el aeropuerto Camilo Daza de Cúcuta, a mediados de la
década de los 90. En ella apreciamos a la entonces represente a la Cámara
Isabel `La Chava` Celis, el alcalde de esa época, Pauselino Camargo; el
ministro de Desarrollo, durante la administración Samper, Rodrigo Marín Bernal,
el gobernador Sergio Entrena y el directivo de la Cámara de Comercio Pedro
Entrena.
En la larga lista de logros, figura la tarea que emprendió hasta alcanzar la
creación de la Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental
(Corponor), mediante el Decreto 3450 de 1983.
En el 2000, durante el mandato de Andrés Pastrana Arango fue un importante
gestor para que se creara la Ley Zonas Especial de Exportación Fronteriza.
En el 2006, por intermedio de la Cámara de Comercio de Cúcuta, Pedro Entrena
Parra publicó el libro “Normas legales expedidas para las regiones
fronterizas de Colombia y en especial para Norte de Santander”, en el que
incluyó una recopilación de las principales leyes y decretos expedidos para el
desarrollo de las fronteras de Colombia.
En el 2009, la Cámara de Comercio lo condecoró con la distinción “Honor al
Mérito Cámara de Comercio de Cúcuta” como reconocimiento a su vida y actividad
cívica en beneficio del desarrollo de Cúcuta y Norte de Santander.
ANDRES ENTRENA PARRA
Andrés
Entrena Parra
Después de permanecer varios días en cuidados
intensivos de la Clínica San José, víctima de una afección respiratoria,
falleció el 13 de octubre de 2014 el doctor Andrés Entrena Parra a la
edad de 83 años.
Estuvo casado con Livia Viccini y era padre de cuatro
hijos: Andrés, Manuel, María del Rocío y Ana María Entrena Viccini.
Hasta el fin de su vida tuvo como hobby el
aeromodelismo.
En su vida profesional estuvo dedicado a la construcción de una gran cantidad
de obras públicas, al servicio de la educación superior y a la presidencia
regional de la Cruz Roja Colombiana.
Estuvo al
frente de la regional de la Cruz Roja Colombiana.
Como educador, el doctor Entrena Parra fue rector de las Universidades
Francisco de Paula Santander y de Santander UDES, Sede Cúcuta.
Ejerció las funciones de asesor a la rectoría de la
UDES en el campo de la planta física hasta su fallecimiento.
El doctor Entrena es considerado en la región como un verdadero paradigma
para las nuevas generaciones, por la buena fe que profesó como norma en todas
sus actividades profesionales y por la aplicación ideal del don del servicio
que le asistió en su vida privada, ocupacional y pública.
REINALDO OMAÑA
El 05 de diciembre de 2014, falleció el reconocido
médico cucuteño Reinaldo Omaña Lozada, quien se había desempeñado como jefe del
servicio de Medicina Interna del Hospital San Juan de Dios. El galeno murió a
los 86 años.
Omaña nació el 14 de febrero de 1928 en Cúcuta y vivió la mayor parte de su
vida en el barrio San Luis.
Fue bachiller en 1946 del colegio Sagrado Corazón de
Jesús y recibió su título de medicina en el año 1954 de la Universidad de
Antioquia.
Toda su vida profesional transcurrió en el Hospital San Juan de Dios, hoy
Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero, donde fue por muchos años Jefe del
servicio de Medicina Interna y por cuyas enseñanzas pasaron un gran número de
profesionales de la salud de nuestra ciudad.
Esta
fotografía fue tomada en 1979 en el hospital San Juan de Dios y reunió a
algunos de los Jefes de Departamento en el antiguo hospital, y la traemos como
un homenaje al cuerpo médico de Norte de Santander ya que se aproxima el Día
Panamericano del Médico. En ella apreciamos de izquierda a derecha, de pié a:
Juan José Maldonado, subdirector; Eduardo Pérez, jefe de ginecología; Gilberto
Bustamante Álvarez, de pediatría, Carlos Parada, de patología y Carlos Rojas,
director. Sentados: Reinaldo Omaña, de medicina interna, Jorge Uribe Calderón
de cirugía pediátrica y Adolfo Martínez Badillo, de nefrología.
Además, Reinaldo Omaña fue uno de los integrantes de
la junta directiva del Cúcuta Deportivo en la década del sesenta, y estuvo allí
cuando el equipo logró el subcampeonato en el año 1964.
Tuvo dos hijos en su matrimonio con Olga Herrán: Patricia y Reinaldo Nicolás,
destacados profesionales de la región.
Por voluntad propia, el médico Omaña fue enterrado en el cementerio de San
Luis.
JULIO USECHE
Julio Useche era hijo de Rafael Useche quien tuvo un
negocio en la avenida 6ª entre calles 11 y 12 llamado La Tachirense. Casó con
Dora Gamboa con quien tuvo 3 hijos Dany, Vanessa y Lorena.
El abogado Julio Useche falleció en Cúcuta. Egresado
de la Universidad la Gran Colombia de Bogotá, Useche estuvo vinculado al
movimiento político fundado por el exsenador Jorge Cristo Sahium, padre del
ministro del Interior Juan Fernando Cristo y del senador Andrés Cristo.
En su época de estudiante universitario alternaba sus
estudios con su trabajo de modelo de pasarela. Tenía un gran gusto por el buen
vestir, diseñaba y cosía sus propias camisas. Le daba un gran valor a la
amistad. Era un caballero en su comportamiento, buenos modales, trato afable y
buen conversador.
En las administraciones de Sergio López Entrena y Eduardo Assaf Elcure fue
gerente del desaparecido Teatro de la Beneficencia y de esta entidad que
producía la Lotería de Cúcuta.
También fue secretario general del Concejo de Cúcuta y
en los últimos años estuvo vinculado a la empresa Apuestas Cúcuta 75 J.J.
Pitta.
Fue presidente de la Liga de Lucha Olímpica.
Fue el primer gerente de la Televisión Regional de Oriente (TRO). Cuando el
canal Tro fue instituido, por mandato de la junta, fue el encargado de iniciar
la constitución de estatutos y la búsqueda de recursos.
Fernando Fonseca Roa escribió:
¨Transcurrían los años sesenta en medio del apacible
ambiente cucuteño, cuando un día mi padre me llevó a caminar por la avenida 5ª,
para mostrarme como era la ciudad que apenas llegaba a los 150 mil habitantes.
De repente, la tranquilidad se interrumpió al pasar frente a los almacenes
Valher, porque un hombre se había introducido en una vitrina que daba a la
calle, para hacer las veces de maniquí.
Con la curiosidad del niño que apenas salía a conocer a
Cúcuta, le pregunte a mi padre que ocurría, y él me respondió:
¡Es un hombre que está vendiendo prendas de vestir!
Vaya manera de vender ropa, pensé inmediatamente y
continuamos la marcha.
Años más tarde me enteré, cuando me ofreció su amistad,
que aquella persona que se atrevió a modelar prendas de vestir por primera vez
en Cúcuta, sirviendo como maniquí, se llamaba Julio Useche.
Fue nombrado administrador de los teatros de la
Beneficencia de Norte de Santander y desde entonces hizo carrera en esa entidad
de carácter departamental, hasta convertirse en gerente de la Lotería de
Cúcuta, la motilona de la suerte.
Cada miércoles se realizaba el sorteo millonario en el
bosque popular o en la esquina del edificio Rosetal en la avenida cero con
calle diez. A Useche le correspondió en una excelente gestión de mercadeo,
contratar artistas nacionales y futbolistas de la selección Colombia, para el
famoso show de la alegría que dirigían Enrique Hernández Cárdenas y Álvaro
Barreto Niño, el popular ´mocho Barreto´. En aquel entonces, los premios
aumentaron y del mismo modo los ingresos de la lotería.¨
Recopilado
por: Gastón Bermúdez V.