La Opinión
Lo que un periodista de La Opinión propuso en una ocasión como inocentada para publicar un 28 de diciembre no tuvo ningún eco entre sus compañeros y jefes y tocó inventarse otras historias.
Su propuesta era informar sobre la hipotética e insólita lluvia de granizo en medio de los 37 ó 39 grados de la temperatura normal de esta zona de frontera. Nadie en Cúcuta iba a creerse este cuento.
Una de las razones que podría esgrimirse para hacer creíble la “inocentada” era echando mano del tan mentado cambio climático que tanto nos atormenta hoy: altas y bajas temperaturas a veces en forma simultánea, lluvias interminables, calores espantosos, vientos huracanados, El Niño, La Niña, los terremotos, la tragedia de Gramalote, los tsunamis, las avalanchas de ríos y quebradas, y otros desastres naturales que hemos sufrido.
Sin embargo, la propuesta del periodista se quedó en pañales ante la cruda realidad.
Aunque parezca increíble y así nadie lo admita hoy, en esta zona llovió granizo hace mucho tiempo, según lo hemos establecido revisando viejos periódicos de la región.
El 3 de octubre de 1946 – de esto se van a cumplir 65 años – la edición No 497 del periódico HOY publicó en la página 9 la insólita noticia del granizo que cayó en Cúcuta.
“Fortísimo Vendaval en la Línea del Ferrocarril” fue el titular con el siguiente subtítulo, o sumario que llamamos hoy: “Lluvia de Granizo en la Zona de Puerto Santander”. Entonces, Puerto Santander no era municipio y su zona de influencia pertenecía a la jurisdicción municipal de Cúcuta.
Entonces también, Cúcuta se conectaba con esa zona a través del Ferrocarril del Norte.
El texto de la noticia publicada por HOY es el siguiente:
“Informaciones que nos han sido suministradas por algunos vecinos de la línea férrea del Norte, dan cuenta de que durante la noche del viernes a sábado de la semana pasada se destacó (¿o se desató?) un fortísimo vendaval que abarcó el sector comprendido entre las estaciones La Jarra, Agua Clara, La Javilla, Pamplonita, hasta Puerto Santander. En esta última zona cayó una terrible lluvia de granizo, fenómeno que causó entre los viejos nativos del puerto fronterizo, verdadero pánico y sorpresa.
“Nadie puede explicarse esta rara “ocurrencia” celeste nunca antes registrada en esa comarca de alta temperatura a toda hora del día y de la noche.
“El fuerte vendaval, acompañado de crudo invierno, derribó gran cantidad de árboles y arrasó sementeras, platanales y ranchos de labriegos que tienen sus fincas en las zonas afectadas por el temporal. Entendemos que uno de los trenes que hacían su recorrido normal en la mañana del sábado, tuvo que demorar su itinerario debido a estar la vía obstaculizada por los arbustos caídos sobre las paralelas.
“Afortunadamente, no se registraron desgracias personales sino materiales, que afectan a varios agricultores que hoy contemplan el fruto de su esfuerzo, destruido por la naturaleza agresiva”.
Aunque el periódico HOY no informó sobre la fecha exacta pudimos establecer que fue la noche del 27 de septiembre de 1946.
Este periódico era dirigido en la época por Eleazar Pérez Peñuela, quien fue alcalde de Cúcuta. En la primera página de la edición del 3 de octubre de 1946 se destaca un aviso grande de Kelvinator, la primera fábrica de refrigeradoras domésticas, según se lee. Y subraya que “mantenemos surtido completo de accesorios y gases para refrigeración”.
Como hubiera ocurrido hoy, la granizada de hace 65 años seguramente contribuyó a bajar un poco la temperatura por breve tiempo.
En la página 9 donde se registró la insólita noticia hay dos avisos, uno de la Línea Aeropostal Venezolana, con el dibujo de un avión y una leyenda que dice “Seguridad, Confort y Rapidez”. El otro es de la Lotería de Cúcuta con los resultados del sorteo No. 129 del 1 de octubre de 1946.
Entonces, el premio mayor, el 72-41, pagó 7.000 pesos y fue vendido en Manizales. En esa época se jugaban también un seco, nueve premios especiales y tres aproximaciones. Eran otros tiempos… y sin el embeleco del cambio climático.
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En el libro la Picaresca Cucuteña publicado hace 22 años, el personaje principal se llamaba Próspero Buenaño (nombre ficticio pero suceso real), el cual se encuentra preso por delinquir en los diferentes puestos públicos que su padrino político le conseguía para recompensarlo por su labor en las zonas marginadas para la consecución de votos.
En el periódico local apareció una noticia sobre el congreso que realizaron los chamanes, brujos, augures, arúspices, adivinos nigromantes, hechiceros, astrólogos, magos y toda la pelambre que forman esta clase de vividores de la credibilidad humana, y cuya farsa final fue la conclusión: un desastre con malísimas consecuencias sucedería en poco tiempo en la ciudad, el signo era que el día lunes el sol había aparecido con unas manchas rojas circulares que predecía el desastre futuro de la urbe.
En la Cárcel Nacional Modelo vía al Cerrito, mientras tanto Próspero Buenaño cuyo prontuario era bastante conocido, en las esferas oficiales, muy señalado por sus fechorías; en su paso por la Secretaría de Educación con adulteración de certificados y diplomas; en la Caja de Previsión Departamental, falsificación de estampillas y nóminas; en la Secretaría de Hacienda sustracción de cheques y certificados de depósitos a término fijo, etc., etc., etc…
Su sorpresa fue mayúscula cuando le comunicaron que el abogado defensor venía a visitarlo con buenas noticias; una vez en la sala de atención, el profesional del derecho le comunicó que le habían aceptado la tutela que se había interpuesto para que le dieran el beneficio de la rebaja de penas por buen comportamiento y por los estudios adelantados en la prisión. La boleta de salida se la firmarían el fin de semana y su abogado lo esperaría el sábado en la puerta del penal para llevarlo a la ciudad para que gozara de su libertad.
Próspero no cabía de la dicha y su cara reflejaba la felicidad por su próxima partida y la noche del jueves sólo pensaba en las cuchipandas y francachelas que armaría con sus amigotes que le habían servido de testaferros mientras pagaba su condena.
Pero nadie esperaba que la acción nefasta que habían manifestado los asistentes a la reunión de los brujos se hiciera realidad; a las tres de la mañana del día viernes, el cielo se oscureció, rayos y centellas aparecieron en el firmamento y lo increíble ya que nunca había sucedido ni se esperaba una gran granizada empezó a caer sobre la ciudad, eran tan grandes las pepas que se parecían a los porrones que utilizamos en los juegos de canicas de cristal cuando niños, los tejados no soportaron el peso y las casas se inundaron, las alcantarillas se taponaron y sólo una gran mancha blanca de hielo se veía en las calles.
En la cárcel todo fue un drama, las dependencias administrativas quedaron arrasadas especialmente los archivos por lo cual se decretó la emergencia judicial en el penal, en el patio principal Próspero Buenaño rumiaba su mala suerte que le quitaba la oportunidad de su salida. La naturaleza que es sabia le estaba cobrando el precio por todas las picardías cometidas en su vida de funcionario público.
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Sí es
posible que en Cúcuta y el área metropolitana llueva granizo. Así lo confirmó el Ideam a La Opinión y explicó las causas de
este fenómeno.
Unos de los sectores en donde vecinos registraron con sus celulares la
granizada fueron La Floresta y la avenida Los Libertadores.
Los recientes cambios de clima en
Cúcuta y el área metropolitana han generado diferentes reacciones entre la
población. Sin embargo, el martes 24 de septiembre de 2019 un hecho inesperado
despertó la curiosidad de más de un internauta.
En redes sociales se publicaron fotografías y videos en donde se describía,
con sorpresa, que en esta calurosa ciudad había caído granizo. Uno de los habitantes sorprendido, que
inclusive narró en un video lo sucedido, afirmó al final de la grabación:
"señoras y señores, primera vez en la vida, en 40 años, que veo granizar
en Cúcuta".
Este hecho también se replicó en el
municipio de Los Patios, donde los usuarios registraron el fenómeno. Y aunque no llovió en toda la
zona, en sectores como La Floresta y la avenida Los Libertadores, testigos
aseguraron y demostraron a través de imágenes, que en medio del aguacero, hubo
"bolitas de hielo".
Para corroborar esta información inicial, La Opinión consultó
al Cuerpo de Bomberos y la Secretaría Municipal de Gestión del Riesgo de
Cúcuta, pero estas entidades informaron que no tenían reportes de este tipo de
evento.
No obstante, la curiosidad
siguió latente en el cuerpo periodístico, teniendo en cuenta que las
temperaturas registradas en los últimos días han sido de hasta 35°C, en semanas
anteriores llegaron a ser de 37°C.
Por ello, atendiendo a las dudas que este hecho suscitó en internet, se
consultó al Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales
(Ideam) que corroboró la información de los internautas. "Efectivamente el día anterior
ocurrieron granizadas en Norte de Santander, el Valle de Aburrá, Bogotá y
Popayán", dijo una funcionaria de esta entidad.
Precisó que aunque sea de clima cálido y se ubique a una altitud 320 metros
sobre el nivel del mar, no está exenta de este fenómeno. Además aclaró que la granizada está asociada a la tormenta tropical
Karen que se mueve en el Caribe.
Por su parte, Mirovan Suerco, meteorólogo del Ideam, explicó por qué este
fenómeno se puede dar en Cúcuta, Norte de Santander.
El experto asegura que el granizo surge cuando hay bastante humedad en el
ambiente atmosférico, por lo que se da una saturación del 100%; a esto se suman
las temperaturas de por debajo de 0 grados Celsius que se hallan en la
atmósfera en donde se forman las nubes.
Para ser más claros, el granizo se produce cuando ocurren tormentas muy
intensas y hay nubes en cuyo interior hay gotas de agua muy frías, que pasan
por varios grados de temperatura y humedad.
Dichas gotas de agua, al congelarse y ser tan grandes y pesadas, no
pueden ser sostenidas por las corrientes ascendentes de aire y caen a la
tierra.
Los trozos de hielo pueden alcanzar
los 8 centímetros de diámetro y más. Según el experto, la velocidad con la que
descienden puede ser de hasta 173 kilómetros por hora. Dichos trozos no son perfectamente
redondos y pueden tener capas y relieves ásperos al tacto.
Cabe recordar que el ciclo del agua es constante; el líquido se
evapora, se congela, vuelve a su estado líquido y esto también ocurre al
interior de las nubes.
Volviendo al tema de Cúcuta, el
meteorólogo aseguró que “si durante las horas de la mañana hubo alta radiación
solar, la condensación del vapor (evaporación) también fue alta, y se concentró
en la atmósfera”.
Mirovan Suerco mencionó que aunque Cúcuta se encuentre en un piso térmico
cálido, se pueden dar precipitaciones en forma de granizo, si surgen las
condiciones atmosféricas. También destacó que es difícil pronosticar lluvia de
granizo, pues no hay la herramienta para ello.
La percepción del meteorólogo concuerda con Gustavo Carrillo, hidrólogo al
servicio de la Universidad Francisco de Paula Santander (UFPS), quien indicó
que la lluvia de granizo “es un evento muy raro para el área de Cúcuta, pero
dadas las condiciones meteorológicas adecuadas puede ocurrir, aún cuando se
esperarían eventos muy localizados y de corta duración, no como las granizadas
extremas que han ocurrido en Bogotá”.
Granizadas históricas
Recordamos algunas granizadas que han pasado a la historia:
*El 30 de abril de 1888 se registró el peor desastre causado
por una granizada en la ciudad india de Moradabad, donde la lluvia de piedras
de hielo causó la muerte de 246 personas.
*En la localidad de Viale,
Argentina, el 7 de septiembre del 2010 cayó la bola de granizo más grande, con 4.4 kilos y
un perímetro de 53 centímetros.
*En agosto de 2019, más de 11.000 aves acuáticas y de
humedales perdieron la vida a causa del granizo que cayó en el Área de Manejo
de Vida Silvestre Big Lake al oeste de Billings, en Montana, Estados Unidos.
Recopilado por : Gastón Bermúdez V.
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